Tribuna:

La hora del púnico

La bolsa de Madrid perdió en la sesión de ayer 11,03 puntos, un 4,48%, lo que sitúa su índice general en el mismo nivel que tenía el día 5 de enero de 1988, cuando el mercado se recuperaba del minicrash de octubre de 1989. La magnitud de esta nueva caída tiene como origen directo el descenso de casi 1.500 yenes de la bolsa de Tokio en la jornada anterior, así como los 76,73 puntos que perdía Wall Street al cierre de la sesión, que llegó a reflejar un cierto clima de pánico entre los inversores. La presión vendedora fue muy fuerte a lo largo de toda la sesión, pero adquirió un tono casi ...

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La bolsa de Madrid perdió en la sesión de ayer 11,03 puntos, un 4,48%, lo que sitúa su índice general en el mismo nivel que tenía el día 5 de enero de 1988, cuando el mercado se recuperaba del minicrash de octubre de 1989. La magnitud de esta nueva caída tiene como origen directo el descenso de casi 1.500 yenes de la bolsa de Tokio en la jornada anterior, así como los 76,73 puntos que perdía Wall Street al cierre de la sesión, que llegó a reflejar un cierto clima de pánico entre los inversores. La presión vendedora fue muy fuerte a lo largo de toda la sesión, pero adquirió un tono casi dramático ante la apertura del mercado norteamericano.La actuación institucional, para la que se sospecha que existe ya el visto bueno oficial, se limitó a absorber papel, pero sin tratar de contener las cotizaciones, salvo en el caso de unos cuantos valores y en los cinco minutos previos al cierre del mercado. El índice madrileño ha bajado un 19,58% desde que comenzaran las tensiones en el golfo Pérsico y ha perdido ya una buena parte de lo recuperado desde el crash de 1987. La situación al cierre era muy negativa para un mercado que se deja influir al tiempo por las bajas de las dos grandes bolsas internacionales y por los datos de la economía española, de los que se espera una trayectoria también negativa para los meses venideros.

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