La gasolina del futuro

En los nuevos precios aprobados por Campsa, es significativo el descenso de la gasolina sin plomo, que cuesta 78 pesetas sobre un máximo posible de 78,5. El precio medio de los seis países europeos es de 87 pesetas. Ello se debe a la necesidad de potenciar el consumo de este tipo de gasolina todavía escaso en España: para adaptarse a la CE.En estos momentos, alrededor de una tercera parte del parque - 11,4 millones de vehículos- pueden utilizar gasolina sin plomo. El resto lo puede utilizar con la aplicación de un catalizador.De cualquier forma, a partir de octubre todos los automóviles con má...

En los nuevos precios aprobados por Campsa, es significativo el descenso de la gasolina sin plomo, que cuesta 78 pesetas sobre un máximo posible de 78,5. El precio medio de los seis países europeos es de 87 pesetas. Ello se debe a la necesidad de potenciar el consumo de este tipo de gasolina todavía escaso en España: para adaptarse a la CE.En estos momentos, alrededor de una tercera parte del parque - 11,4 millones de vehículos- pueden utilizar gasolina sin plomo. El resto lo puede utilizar con la aplicación de un catalizador.De cualquier forma, a partir de octubre todos los automóviles con más de 2.000 cc. matriculados estarán provistos de catalizador. A partir de julio de 1992, lo estarán también los nuevos modelos de menos de esa cilindrada y a partir de enero de 1993 todas las nuevas matriculaciones de cualquier cilindrada. Industria publicará la lista de modelos y ya lo han comenzado a hacer algunos fabricantes.

A final de 1989, se consumieron 36.900 metros cúbicos de gasolina sin plomo, lo que supone el 0,4%. Por otra parte, se va a ampliar la red de gasolineras con posibilidades de vender la gasolina sin plomo de 419 actuales a 793 a finales de octubre, que deben repartirse equitativamente.