El Gobierno holandés quiere crear unas cárceles donde convivan presas y reclusos

Las presas holandesas podrán compartir las galerías de los hombres si el Parlamento de los Países Bajos aprueba el plan que le ha remitido el Ministerio de Justicia y que será discutido este verano. El proyecto señala también que la población reclusa extranjera, que ahora ocupa una cuarta parte de las 7.000 celdas del país, será reagrupada por nacionalidades.El Ministerio de Justicia holandés pretende romper así el aislamiento de los detenidos no nacionales y aprovechar las facilidades de las cárceles masculinas, más grandes y mejor acondicionadas que las cinco destinadas a las mujeres y ocupa...

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Las presas holandesas podrán compartir las galerías de los hombres si el Parlamento de los Países Bajos aprueba el plan que le ha remitido el Ministerio de Justicia y que será discutido este verano. El proyecto señala también que la población reclusa extranjera, que ahora ocupa una cuarta parte de las 7.000 celdas del país, será reagrupada por nacionalidades.El Ministerio de Justicia holandés pretende romper así el aislamiento de los detenidos no nacionales y aprovechar las facilidades de las cárceles masculinas, más grandes y mejor acondicionadas que las cinco destinadas a las mujeres y ocupadas por 240 personas. Para lograrlo será necesaria una reforma de la ley de prisiones.

Dicho texto en vigor explica claramente que hombres y mujeres deben estar siempre separados cuando sean condenados a prisión. Lo mismo sucede con los penados menores de edad, ahora retenidos en otros centros. El proyecto de Justicia regula también su Integración entre los adultos, dado que cada preso dispone de una celda individual en Holanda.

Un grupo de expertos del ministerio estudia ahora las consecuencias económicas y personales que las nuevas medidas tendrían entre los funcionarios de prisiones. Representantes del departamento de Justicia han asegurado que desean también reducir el recurso de la cárcel como castigo. Para ello fomentarán la aplicación de sanciones como el trabajo forzado y no remunerado.

Arresto electrónico

Las propuestas remitidas al Parlamento Incluyen una serie de clases de holandés para los detenidos extranjeros que pretendan permanecer en el país una vez cumplida la condena. Y recogen además cursos de readaptación social dirigidos a los que regresan a su propia tierra.Por otra parte, Justicia decidirá el próximo septiembre si desarrolla un experimento para vigilar a las personas que cumplen arresto domiciliario. Se trataría de vigilarlas por medio de una anilla electrónica sujeta a la pierna y que emitiría señales continuas sobre sus movimientos, similar al sistema que se utiliza ya en Estados Unidos. El ministro deberá pronunciarse personalmente sobre este extremo.

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