Un cortocircuito a sin luz a un millar de del barrio de Salamanca

Alrededor de 1.000 vecinos de la llamada almendra central de Madrid tuvieron que sobrellevar ayer más de 12 horas sin electricidad a consecuencia de un cortocircuito ocurrido poco después de la medianoche del miércoles en un transformador de la compañía Unión Eléctrica Fenosa, por causas desconocidas.Los inmuebles afectados por el corte de fluido eléctrico fueron los números 11 y 13 de la calle de O'Donnell; las fincas 51, 54, 59, 62, 64 y 66 de la calle de Jorge Juan; los edificios situados entre los números 2 y 14 de la calle del Príncipe de Vergara; del 1 al 8 de la calle de Espartin...

Alrededor de 1.000 vecinos de la llamada almendra central de Madrid tuvieron que sobrellevar ayer más de 12 horas sin electricidad a consecuencia de un cortocircuito ocurrido poco después de la medianoche del miércoles en un transformador de la compañía Unión Eléctrica Fenosa, por causas desconocidas.Los inmuebles afectados por el corte de fluido eléctrico fueron los números 11 y 13 de la calle de O'Donnell; las fincas 51, 54, 59, 62, 64 y 66 de la calle de Jorge Juan; los edificios situados entre los números 2 y 14 de la calle del Príncipe de Vergara; del 1 al 8 de la calle de Espartinas; del 66 al 94 y del 123 al 133 de la calle de Alcalá; del 1 al 12 de la calle del General Pardiñas, y el 3, 5 y 7 de la calle de Antonio Acuña.

El apagón afectó también al alumbrado público y a los semáforos de la zona, por lo que se registraron importantes retenciones de tráfico.

La Policía Municipal tuvo que cortar durante varias horas la calle de Alealá entre Juan Bravo y Príncipe de Vergara, para facilitar las labores de extinción, y la calle de Jorge Juan entre Alcalá y Juan Bravo para posibilitar las tareas de reparación de la avería. Un grupo de agentes permaneció en el lugar del incendio para regular el tráfico ante la avería de semáforos y farolas.

Aunque el incendio fue sofocado por los bomberos en menos de dos horas, los trabajos de reparación de la avería, que comenzaron a las seis de la mañana de ayer, se llevaron a cabo con grandes dificultades.

Estos problemas tuvieron su origen en el hecho de que el fuego afectó a 27 cables subterráneos diferentes, con una longitud total de 400 metros, y los 15 técnicos que según Unión Fenosa participaron en la operación tuvieron que esperar a que se disipara la espuma utilizada por los servicios de extinción, ante la imposibilidad de usar agua al tratarse de una instalación eléctrica. Además, los operarlos se vieron obligados a reparar cada cable uno por uno y a practicar zanjas en algunas de las calles afectadas para poder acceder a las conducciones eléctricas.

Pérdida de clientes

El servicio fue restableciéndose paulatinamente a lo largo de la mañana y de la tarde de ayer. Aunque no se registraron problemas de orden público por el apagón, y muchos vecinos no notaron la falta de electricidad hasta primera hora de la mañana, dado lo avanzado de la hora en que se produjo el incendio, algunos de los comerciantes de la zona se vieron perjudicados en su negocio por culpa de la avería.