11 detenidos y 112 kilos de pasta de coca aprehendidos en un laboratorio clandestino

Once personas han sido detenidas y se han aprehendido más de 112 kilos de pasta de coca, de los que se hubieran podido elaborar 100 kilos de cocaína, en una operación policial en la que se ha desmantelado un laboratorio clandestino situado en la localidad madrileña de El Molar. Cuatro de los arrestados tienen nacionalidad colombiana, y el resto son españoles. La droga incautada, una vez transformada, hubiera alcanzado un valor de más de 1.000 millones de pesetas, distribuida en millones de dosis, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía.

El jefe de la Brigada Provincial de...

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Once personas han sido detenidas y se han aprehendido más de 112 kilos de pasta de coca, de los que se hubieran podido elaborar 100 kilos de cocaína, en una operación policial en la que se ha desmantelado un laboratorio clandestino situado en la localidad madrileña de El Molar. Cuatro de los arrestados tienen nacionalidad colombiana, y el resto son españoles. La droga incautada, una vez transformada, hubiera alcanzado un valor de más de 1.000 millones de pesetas, distribuida en millones de dosis, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía.

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El jefe de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Madrid, Manuel Prieto, señaló ayer en una conferencia de prensa que en la operación, efectuada el jueves y el viernes pasados y en la que intervinieron 25 funcionarios, se desmanteló uno de los laboratorios clandestinos de droga "más importantes".Uno de los 11 detenidos, el colombiano Carlos Alfonso Patiño, de 51 años y apodado El Negro Patiño, está considerado como el principal responsable del laboratorio. Patiño fue utilizado por un cartel de narcotraficantes colombianos para introducir la droga en España, ocultada en pulpa de maracuyá congelada, a través de la empresa con la que se dedicaba a la fabricación de helados, precisó Prieto.

Prieto explicó que se trata de un laboratorio "completísimo" que estaba en fase de prueba, y agregó que no consta que de él haya salido cocaína al mercado. En el edificio se hallaron también miles de litros de acetona, ácido clorhídrico y sulfúrico y otras sustancias químicas, además de lámparas y planchas de secado, bombonas de gas y quemadores utilizados en el proceso de conversión de la pasta de coca en cocaína.

El resto de los detenidos son los colombianos María Victoria Franco de Patiño, de 50 años; Bertulfo Castellanos Ramírez, de 38, y Camilo Sánchez Contreras, de 51 años; así como los españoles Vicente Sánchez Valera, de 38 años; Gregorio Sánchez Trejo, también de 38; Carmen Trejo Hernández, de 61 años; Javier Pérez Báez, de 33; Sebastián Ramos Moreno, de 46, y los hermanos Carlos y Francisco Sánchez Trejo, de 28 y 23 años, respectivamente.

Según la policía, todavía se van a practicar más detenciones de ciudadanos españoles que han creado la infraestructura para los narcotraficantes.

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Los 112 kilos de pasta de coca fueron hallados por la policía en el maletero del coche que conducía en Fuencarral Vicente Sánchez Varela en el momento de su detención. Otros 800 gramos de esta sustancia se encontraron en el domicilio de otro de los detenidos, Gregorio Sánchez Trejo, situada en la calle de Labajos.

El laboratorio clandestino estaba situado en el kilómetro 38 de la N-I, en el término municipal de El Molar, oculto en una casa vieja de ladrillo visto y en reconstrucción, dentro del paraje conocido como Puente Hundido, informa Marisol Castro.

En un primer momento se creyó que el laboratorio clandestino estaba localizado en el término municipal de Guadalix de la Sierra, lo que provocó gran revuelo entre los vecinos.

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