Saltar la reja

Hoy es el día grande. Tras el rosario procesional de anoche, la aldea de El Rocío se prepara para el clímax. En la madrugada del lunes, los hombres de Almonte saltarán la reja del presbiterio de la ermita para apoderarse de la Virgen. La imagen navegará sobre la multitud en una explosión de júbilo y sentimiento colectivo.Como es tradicional, los almonteños llevarán la imagen a hombros sin dejar que los foráneos toquen el manto. La Blanca Paloma saludará a las hermandades, pero puede dar la espalda a alguna si los almonteños consideran que tia incurrido en alguna falta. "La Virgen del Rocío no ...

Hoy es el día grande. Tras el rosario procesional de anoche, la aldea de El Rocío se prepara para el clímax. En la madrugada del lunes, los hombres de Almonte saltarán la reja del presbiterio de la ermita para apoderarse de la Virgen. La imagen navegará sobre la multitud en una explosión de júbilo y sentimiento colectivo.Como es tradicional, los almonteños llevarán la imagen a hombros sin dejar que los foráneos toquen el manto. La Blanca Paloma saludará a las hermandades, pero puede dar la espalda a alguna si los almonteños consideran que tia incurrido en alguna falta. "La Virgen del Rocío no tiene dueño, que la encontró en una encina un manriqueño", dice la copla. Esta polémica se desata todos los años. El celo de los de Almonte es a menudo criticado por el resto de los rocieros, que querrían más generosidad.

Pero esto también forma parte de la tradición, que se remonta al siglo XII. Sobre el año 1280 el rey Alfonso X El Sabio construyó una ermita y colocó en ella una imagen gótica. Era la Virgen de las Rocinas.

Según la leyenda, la talla se escondió para preservarla de las incursiones árabes. En el siglo XV, un vecino de Villamanrique la halló en el tronco de un árbol. En ese lugar, los almonteños levantaron una ermita y comenzaron las romerías.