Cartas al director

Todo tipo de presos

En relación con su editorial sobre Derecho de defensa desearía puntualizar:En relación con las imputaciones que me hace la Dirección General de Instituciones Penitenciarías de servir de correo a la organización terrorista, tal denuncia fue archivada por no ser constitutiva de delito por el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, señor Escusol, sin ni siquiera abrir diligencias, tras habérsela enviado el anterior fiscal general con la recomendación de archivo. Por tanto, ya se ha dirimido la veracidad de tales imputaciones, las cuales eran absolutamente falsas, y el Colegio de Abogados lo ...

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En relación con su editorial sobre Derecho de defensa desearía puntualizar:En relación con las imputaciones que me hace la Dirección General de Instituciones Penitenciarías de servir de correo a la organización terrorista, tal denuncia fue archivada por no ser constitutiva de delito por el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, señor Escusol, sin ni siquiera abrir diligencias, tras habérsela enviado el anterior fiscal general con la recomendación de archivo. Por tanto, ya se ha dirimido la veracidad de tales imputaciones, las cuales eran absolutamente falsas, y el Colegio de Abogados lo sabe. En segundo lugar, si ustedes han leído el comunicado que presenté al Colegio de Abogados, cuya copia le entregué a su reportero Julio Martínez Lázaro, en ningún momento manifiesto que me han limitado el ejercicio de defensa con los presos de los GRAPO porque ha sido con todo tipo de presos, como sabe muy bien el Colegio de Abogados. De hecho, el día 13 de febrero ustedes publicaron lo siguiente: "Los letrados critican al colegio de Madrid por no defender sus peticiones". "Encierro de abogados para denunciar trabas de Prisiones en el ejercicio de la defensa" (esta letrada figura en la foto de Miguel Gener).

Llevo meses poniendo innumerables denuncias ante los juzgados de vigilancia penitenciaria de media España, querellas ante los juzgados de instrucción, escritos al Defensor del Pueblo, Derechos Humanos, etcétera, notificándoselo puntualmente al Colegio de Abogados, a fin de conseguir su amparo, y lo único que he logrado es que me abran un expediente con falsas imputaciones públicas y que reciba insultos y amenazas a través del contestador automático.-

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