Dos de los mayores bancos holandeses, ABN y Amro, comienzan a negociar su proceso de fusión

Las juntas directivas de dos de los mayores bancos holandeses, el Banco General de Holanda (ABN) y el Banco de Amsterdam y Rotterdam (Amro), anunciaron ayer su intención de proceder a una fusión en los próximos meses si el estudio conjunto que han iniciado para ello arroja resultados positivos. La unión se realizaría sobre la base de una cooperación total y en igualdad de condiciones para mejorar su posición a escala doméstica y en el futuro mercado financiero europeo de 1992. La noticia cayó como una bomba en la Bolsa de Amsterdam, que suspendió la cotización de las acciones de ambos bancos h...

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Las juntas directivas de dos de los mayores bancos holandeses, el Banco General de Holanda (ABN) y el Banco de Amsterdam y Rotterdam (Amro), anunciaron ayer su intención de proceder a una fusión en los próximos meses si el estudio conjunto que han iniciado para ello arroja resultados positivos. La unión se realizaría sobre la base de una cooperación total y en igualdad de condiciones para mejorar su posición a escala doméstica y en el futuro mercado financiero europeo de 1992. La noticia cayó como una bomba en la Bolsa de Amsterdam, que suspendió la cotización de las acciones de ambos bancos hasta nueva orden. El Banco de Holanda, por su parte, se ha mostrado conforme con este proyecto.La decisión de explorar las posibilidades de un acuerdo fue comunicada también ayer al ministro de Economía, Wim Kok. El presidente del Banco Central Holandés y los sindicatos, así como los representantes de los trabajadores de las dos entidades fueron también informados (ABN cuenta con 18.000 empleados y Amro suma 20.000.) De unirse ambos, serían el sexto banco europeo y el número 19 del mundo, acumulando un capital común de unos 15.000 millones de florines (un florín equivale a unas 57 pesetas). El balance total del Amro arroja una cifra de 179.000 millones de florines; el de ABN, 173.000 millones de florines. Los beneficios del primero en 1989 fueron de 849.000 millones de florines. ABN, por su parte, obtuvo 735.000 millones de florines.

El propio titular de Economía remitió ayer una nota al Parlamento donde muestra su acuerdo con la posible fusión. En su misiva, Kok asegura también que está dispuesto a facilitar la nota oficial de su conformidad, un trámite obligado para cualquier concentración bancaria según la ley holandesa de supervisión de créditos nacionales.

Portavoces de ambos bancos han asegurado que la fusión no modificará su política de atención al cliente y pondrá en peligro puestos de trabajo. Por su parte, la Federación Holandesa de Sindicatos (FNV) deploró ayer en un comunicado el proyecto y ha anunciado ya su rechazo frontal si no son mantenidos todos los empleos. La FNV cree que las futuras operaciones conjuntas de ABN y Amro sólo reportarán recortes laborales.

Tanto ABN como Amro poseen sus oficinas centrales en Amsterdam y entre los empleados respectivos cundió al parecer ayer la alarma. Para Amro éste es el segundo intento de fusión de los últimos meses. El pasado año tanteó sin éxito al Banco General de Bélgica, del que ahora posee un 5% de las acciones.

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