El ANC enviará una delegación a Suráfrica para negociar con el presidente De Klerk

ENVIADO ESPECIALEl Cogreso Nacional Africano (ANC) anunció ayer su decisión de enviar una delegación para que discuta con el presidente Frederik W. de Klerk el modo de eliminar los obstáculos que dificultan la creación de una atmósfera en la que sea posible negociar el futuro de Suráfrica. La decisión del ANC es el primer paso que Nelson Mandela considera debe darse para poner fin a la lucha armada que sigue defendiendo el movimiento.

La cúpula del ANC ha discutido durante dos días en su cuartel general de Lusaka la respuesta formal al discurso de De Klerk de hace dos semanas y ayer pub...

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ENVIADO ESPECIALEl Cogreso Nacional Africano (ANC) anunció ayer su decisión de enviar una delegación para que discuta con el presidente Frederik W. de Klerk el modo de eliminar los obstáculos que dificultan la creación de una atmósfera en la que sea posible negociar el futuro de Suráfrica. La decisión del ANC es el primer paso que Nelson Mandela considera debe darse para poner fin a la lucha armada que sigue defendiendo el movimiento.

La cúpula del ANC ha discutido durante dos días en su cuartel general de Lusaka la respuesta formal al discurso de De Klerk de hace dos semanas y ayer publicó un comunicado en el que puso de manifiesto que, sin renunciar a sus exigencias básicas, acepta las oportunidades de actuación política que le brinda el Gobierno: el ANC va a volver a Suráfrica y a preparar la vuelta de los exiliados.

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Todavía no es posible hablar de negociación, dice el ANC, porque el Gobierno sigue sin liberar a todos los presos políticos y sin suspender por completo el estado de excepción -además de que se mantiene la legislación represiva, se siguen celebrando juicios políticos y hay tropas en los guetos-; pero, para contribuir a la disipación de tales trabas en el más corto plazo de tiempo, el grupo "ha decidido entrevistarse con De Klerk cuanto antes para discutir con él la necesidad de abordar tales cuestiones de modo que se cree un clima que haga posible la negoci ación".

El ANC, además, "buscará negociar con el régimen de Pretoría una mutua suspension de hostilidades", dice el comunicado. La suspensión unilateral "ha sido considerada en profundidad" por la ejecutiva del ANC, que ha llegado a la conclusión de que "no es posible una moratoria unilateral o una suspensión de la lucha, armada" mientras el Ejecutivo no elimine las leyes represivas.

La dirección del ANC reitera que no hay justificación para eliminar las sanciones económicas contra Suráfrica y señala que "los problemas del país sólo podrán resolverse cuando Suráfrica se haya transformado en una democracia no racial".

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El comunicado es un contenido gesto del ANC hacia la búsqueda de: un terreno común con el Gobierno, la táctica que esta semana ha estado defendiendo Mandela, quien considera que la piedra angular sobre la que construir las negociaciones es que ambas partes discutan directamente un cese de hostilidades. Las conclusiones del ANC, en cualquier caso, están lejos de responder a las expectativas que se habían dejado filtrar desde Lusaka y son muestra de que las diferencias entre pragmáticos y fundamentalistas no están completamente saldadas. El comunicado, por ejemplo, se pronuncia a favor de las nacionalizaciones -política tambien defendida por Mandela, quien con ello ha hecho tambalearse a la Bolsa de Johanesburgo-; sin embargo, una alta fuente del ANC en Lusaka declaraba ayer a Business Day, el periódico de la comunidad de negocios surafricana, que no existe tal propósito "porque no queremos hundir la economía".

La liberación de Mandela, mientras, sigue dando fuerza a los partidos de derecha y ultraderecha.

La manifestación convocada por el Partido Conservador el jueves por la noche en Pretoria para protestar contra las reformas de De Klerk fue un éxito. En una atmósfera cargada de racismo en la que algunos manifestantes pidieron la horca para Mandela, el líder conservador, Andries Treurnicht exigió la constitución de una nueva República sólo para blancos en parte del país.

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