El sargento de la Policía Municipal acusado de cohecho prestó declaración

El sargento de la Policía Municipal denunciado por el concejal del distrito de Salamanca, Pedro Ortiz, como presunto autor de un delito de cohecho prestó ayer declaración ante el oficial de Asuntos Internos del cuerpo, según informó el concejal de Seguridad y Policía Municipal, Fernando Bocanegra. En los próximos días comparecerá Ortiz y, si lo desea, la vecina cuyo testimonio desencadenó la denuncia.Un familiar de B. M. M., la mujer en cuya casa se realizaban las obras, explicó a este periódico que las obras se realizaban en el segundo piso de una finca de la calle de Claudio Coello. El sarg...

El sargento de la Policía Municipal denunciado por el concejal del distrito de Salamanca, Pedro Ortiz, como presunto autor de un delito de cohecho prestó ayer declaración ante el oficial de Asuntos Internos del cuerpo, según informó el concejal de Seguridad y Policía Municipal, Fernando Bocanegra. En los próximos días comparecerá Ortiz y, si lo desea, la vecina cuyo testimonio desencadenó la denuncia.Un familiar de B. M. M., la mujer en cuya casa se realizaban las obras, explicó a este periódico que las obras se realizaban en el segundo piso de una finca de la calle de Claudio Coello. El sargento acudió a la casa e informó a los obreros que la licencia no estaba en orden y que quería ponerse en contacto con las dueña. A la dueña de la casa le dijo que la licencia de obra menor que había obtenido en la Junta Municipal no era suficiente y que necesitaba una licencia de obra mayor. Ofreció, siempre según la versión de la afectada, "un arreglo interno". El sargento dijo que la licencia de obra mayor costaba unas 18.000 ó 20.000 pesetas.

La madre de la B. M. M. se acercó a la Junta de Distrito de Salamanca y pidió una nueva licencia especificando las obras que se hacían. Como no se tocaba ningún tabique en la oficina informaron que bastaba con la licencia de obra menor y que si alguien exigía otro documento se trataba de algo ilegal.

La mujer se dirigió al despacho del concejal y éste la recibió inmediatamente. Tras oir su versión, se trasladó con ella al piso; encontraron al sargento en la escalera. El policía municipal esperó a que Ortiz abandonara la casa para subir de nuevo al domicilio, en el que permanecía la secretaria del concejal. Ante estos hechos, Ortiz solicitó la apertura de una investigación.