Muface afirma que garantizará los servicios de todos los funcionarios adscritos a Sánitas

La Mutualidad de Funcionarios Civiles del Estado (Muface) hizo saber ayer a través de un comunicado oficial que piensa garantizar la asistencia sanitaria de todos los funcionarios, tras la retirada de Sánitas de la cobertura asistencial que venía prestando a los funcionarios civiles, a través de Muface, y a los funcionarios militares de Isfas."La decisión unilateral de Sánitas de renunciar a la prestación sanitaria a los funcionarios durante 1990", señala el citado comunicado oficial, "no plantea a las mutualidades Muface e Isfas ningún problema para la cobertura médicohospitalaria de los mutu...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La Mutualidad de Funcionarios Civiles del Estado (Muface) hizo saber ayer a través de un comunicado oficial que piensa garantizar la asistencia sanitaria de todos los funcionarios, tras la retirada de Sánitas de la cobertura asistencial que venía prestando a los funcionarios civiles, a través de Muface, y a los funcionarios militares de Isfas."La decisión unilateral de Sánitas de renunciar a la prestación sanitaria a los funcionarios durante 1990", señala el citado comunicado oficial, "no plantea a las mutualidades Muface e Isfas ningún problema para la cobertura médicohospitalaria de los mutualistas ya que todos aquellos que habían elegido a la aseguradora Sánitas podrán optar ahora por insertarse en cualquiera de las otras entidades concertadas con las mutualidades, o adscribirse a la red sanitaria de la Seguridad Social".

Sánitas, una de las primeras compañías privadas españolas de asistencia sanitaria, decidió recientemente no presentar ninguna oferta a Muface e Isfas. El motivo alegado oficialmente para no concurrir al concurso es el desfase de cuotas que estas dos mutualidades abonan a la aseguradora, y que, según fuentes de Sánitas, ha originado pérdidas este año de 2.400 millones.

Los responsable de Sánitas, empresa adquirida en 1988 por la mutua británica BUPA, afirmaron que no descartan llegar a un acuerdo satisfactorio para 1991, aunque plantean la necesidad de una subida de cuotas entre un 55% y un 70%.

Archivado En