El 'cinturón rojo' amortigua el fuerte descenso del PSOE
Los votos de las localidades del cinturón rojo de Madrid han amortiguado el fuerte retroceso electoral sufrido por los socialistas en la capital. Izquierda Unida, con un espectacular incremento del 164%, recoge el favor de muchos de los electores desafectos al PSOE, pero el líder del Partido Popular, José María Aznar, se ufana con razón de haber derrotado a Felipe González en Madrid. Mantenerse en el poder por tercera vez consecutiva le ha costado al partido socialista más de medio millón de votos en la Comunidad Autónoma de Madrid, donde reside una cuarta parte de todos los electores e...
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Los votos de las localidades del cinturón rojo de Madrid han amortiguado el fuerte retroceso electoral sufrido por los socialistas en la capital. Izquierda Unida, con un espectacular incremento del 164%, recoge el favor de muchos de los electores desafectos al PSOE, pero el líder del Partido Popular, José María Aznar, se ufana con razón de haber derrotado a Felipe González en Madrid. Mantenerse en el poder por tercera vez consecutiva le ha costado al partido socialista más de medio millón de votos en la Comunidad Autónoma de Madrid, donde reside una cuarta parte de todos los electores españoles que renegaron del PSOE ras haberle aupado a la mayoría absoluta en 1982.En los siete años transcurridos desde las legislativas del 82 el PSOE ha perdido uno de cada de tres de sus votantes madrileños un 37,8%), cuando el retroceso que ha experimentado en el conjunto del electorado nacional apenas supera el 20%. La caída socialista, sin embargo, fue más significativa en 1986 -cuando perdió casi el 27% de los electores que le respaldaron en 1982 en la región de Madrid- que la reflejada por las urnas el pasado domingo, un 14,28%. En las dos últimas elecciones generales el partido de Felipe González ha retrocedido más en la circunscripción madrileña que en el conjunto del país.
Por el contrario, la abstención registrada en la Comunidad de Madrid ha sido inferior en casi tres puntos a la media nacional (30,08%).
Precisamente en cuatro grandes ayuntamientos de esa zona -Majadahonda, Colmenar Viejo, Pozuelo de Alarcón y Las Rozas-, logra el PP ser la fuerza más votada. Los socialistas, a pesar de la pérdida experimentada, mantienen el número uno en los otros 16 municipios de Madrid con más de 20.000 habitantes. Por lo demás, el PSOE, en 97 pueblos, y el PP, en 82, se reparten la hegemonía por número de votos en los municipios de la región.
El presidente de la Comunidad, de Madrid y secretario general de la Federación Socialista Madrileña, Joaquín Leguina, reconoció ayer que su partido precisa una "clarificación ideológica" para recuperar el voto "que ha conseguido aglutinar Izquierda Unida". Leguina recordó que sigue estando abierta "la puerta de las elecciones anticipadas" en la Comunidad.
Voto triplicado
La coalición encabezada por Julio Anguita ha visto incrementado en un 164% su apoyo electoral en la Comunidad de Madrid, al captar 255.465 nuevos sufragios. En los municipios más poblados de la región, Izquierda Unida duplica o triplica los resultados que obtuvo en las elecciones genarales de 1986. En Fuenlabrada, por ejemplo, pasa de 2.658 votos a 10.616. Sin embargo, el PSOE es la primera fuerza en todos los ayuntamientos que cuentan con alcalde de IU: Arganda del Rey, Ciempozuelos, Coslada, San Fernando de Henares y Pinto.
El PP, con 922.188 votos, pasa a ser, por primera vez, el partido más votado en la región, si bien su ascenso electoral apenas supone un 3,45% respecto al que logró en 1982. Los populares superan en casi un 12% sus resultados de 1986, en los que sufrió un retroceso del 7,56% respecto a la convocatoria de 1982. El partido de José María Aznar se hace con tres de las cuatro actas de senador de la circunscripción de Madrid, a pesar de que el ex alcalde de Madrid, el socíalista Juan Barranco, consigue ser el más votado con 942.452 votos.
El Centro Democrático y Social sufre una sangría de votos en los principales municipios madrileños, que en el conjunto de la región supera el 18%, y cede el papel de tercera fuerza a IU.