La calma chicha

En los mares del sur, los barcos de vela entraban a veces en zonas de calma total en las que resultaba imposible moverse por faltar la más leve pizca de viento. Una calma chicha en el volumen de contratacion, -que viene a ser el viento que impulsaría la nave bursátil- se ha cebado con la Bolsa de Barcelona, y las cotizaciones apenas se mueven, ni adelante ni atrás. Ayer, la monotonía caracterizó una sesión donde se cruzaron pocas operaciones. El índice general provisional subió 0,32 puntos. Sólo eléctricas, químicas y monopolios, apuntaron retrocesos en su cotización. En el resto hubo a...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

En los mares del sur, los barcos de vela entraban a veces en zonas de calma total en las que resultaba imposible moverse por faltar la más leve pizca de viento. Una calma chicha en el volumen de contratacion, -que viene a ser el viento que impulsaría la nave bursátil- se ha cebado con la Bolsa de Barcelona, y las cotizaciones apenas se mueven, ni adelante ni atrás. Ayer, la monotonía caracterizó una sesión donde se cruzaron pocas operaciones. El índice general provisional subió 0,32 puntos. Sólo eléctricas, químicas y monopolios, apuntaron retrocesos en su cotización. En el resto hubo alzas moderadas, y sólo superaron el entero los sectores de cementos y comercio y finanzas.

Archivado En