El accidente de lowa reabre la polémica sobre la seguridad de los DC-10

El accidente aéreo ocurrido el miércoles por la noche en el Estado norteamericano de lowa, que causó 68 muertos y 52 desaparecidos de un total de 298 pasajeros y tripulantes, ha vuelto a suscitar la polémica sobre la seguridad de los aviones DC-10, fabricados por McDonnell Douglas. Al siniestro se sumó ayer el aterrizaje imprevisto de otro DC-10 de United Airlines. En este caso, el segundo en 24 horas, el piloto, que volaba de Nueva York a San Francisco, optó por aterrizar en Chicago por problemas mecánicos.El siniestro del miércoles se produjo por el fallo hidráulico en un motor, que se despr...

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El accidente aéreo ocurrido el miércoles por la noche en el Estado norteamericano de lowa, que causó 68 muertos y 52 desaparecidos de un total de 298 pasajeros y tripulantes, ha vuelto a suscitar la polémica sobre la seguridad de los aviones DC-10, fabricados por McDonnell Douglas. Al siniestro se sumó ayer el aterrizaje imprevisto de otro DC-10 de United Airlines. En este caso, el segundo en 24 horas, el piloto, que volaba de Nueva York a San Francisco, optó por aterrizar en Chicago por problemas mecánicos.El siniestro del miércoles se produjo por el fallo hidráulico en un motor, que se desprendió. En la década de los setenta, accidentes en aviones de este tipo causaron cerca de 1.000 muertos. McDonnell Douglas suspendió la fabricación del modelo DC- 10 en 1983 por falta de pedidos.

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