Versiones encontradas

El malo de esta película, siguiendo los comentarios de la cocina del hospital general de La Paz, era el subdirector de gestión y encargado directo de las cocinas, Serafín Berrocal. Una persona de su oficina remitió a EL PAÍS al superior, el director de gestión de La Paz, Jesús Rodríguez Liras, quien señaló que la avería se produjo el 30 de junio y ha afectado a un intercambiador conectado al túnel de lavado de la cocina. Reconoce que "ha habido menor cantidad de agua caliente", ya que existen dos líneas paralelas de agua "y es posible que en algunos momentos del día no se haya alcanzado...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El malo de esta película, siguiendo los comentarios de la cocina del hospital general de La Paz, era el subdirector de gestión y encargado directo de las cocinas, Serafín Berrocal. Una persona de su oficina remitió a EL PAÍS al superior, el director de gestión de La Paz, Jesús Rodríguez Liras, quien señaló que la avería se produjo el 30 de junio y ha afectado a un intercambiador conectado al túnel de lavado de la cocina. Reconoce que "ha habido menor cantidad de agua caliente", ya que existen dos líneas paralelas de agua "y es posible que en algunos momentos del día no se haya alcanzado la temperatura adecuada. El retraso en arreglar la avería se ha debido a que las empresas que podían hacerlo no tenían ese tipo de pieza aquí, por lo que ha habido que importarla. El próximo lunes quedará solucionado el problema", aseguró Rodríguez Liras. "Así reciben los enfermos los cubiertos", señaló., mostrando varios cubiertos envueltos pulcramente en plástico y sellados."Una o dos pinches de cocina se quejaron ayer [por anteayer] de que no había agua caliente", manifestó Pedro Bejarano, presidente de la Junta de Personal. "Yo les pedí la protesta por escrito, aunque la. trasmití y me dijeron que entre hoy [por ayer] y mañana [por hoy] estaría solucionado".

Más información

"Creo que han cambiado las cosas", afirmó Jaime Comunión, director del Laboratorio Municipal de Madrid. El organismo no dispone da datos posteriores a 1986, año en que se inspeccionaron las cocinas de 72 hospitales madrileños. El 80% de estas dependencias presentaba anomalías. El 36% no disponía de lavavajillas; el 85% carecía de lavamanos de acción no manual, no tenía toallas de un sólo uso o secador automático; el 73% de las 88 cocinas visitadas -había centros que tenían más de una- tenían ventanas sin protección contra insectos y roedores. Los alimentos, en muchos casos, no se aislaban del suelo, lo que es preceptivo; los cuartos para depositar basura tenían deficiencias o no existían. El suelo se barría en seco en la mitad de los casos y en el 15,5% se hacía mientras se preparaba la comida.

Archivado En