Hacienda fijará un ajuste transitorio para las comunidades afectadas por el cambio del FCI

El Ministerio de Economía y Hacienda establecerá una compensación transitoria en el reparto de los más de 200.000 millones de pesetas del Fondo de Compensación Interterritorial (FCI) de forma que las comunidades afectadas por la reforma del fondo mantengan hasta 1992 su actual participación proporcional en el reparto. Hacienda aprovechará la próxima reforma de los mecanismos de financiación autonómica en 1991 para convertir el FCI en un instrumento corrector de los desequilibrios regionales.

Hasta entonces, la idea de Hacienda es dejar en suspenso el actual mecanismo de reparto debido a...

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El Ministerio de Economía y Hacienda establecerá una compensación transitoria en el reparto de los más de 200.000 millones de pesetas del Fondo de Compensación Interterritorial (FCI) de forma que las comunidades afectadas por la reforma del fondo mantengan hasta 1992 su actual participación proporcional en el reparto. Hacienda aprovechará la próxima reforma de los mecanismos de financiación autonómica en 1991 para convertir el FCI en un instrumento corrector de los desequilibrios regionales.

Hasta entonces, la idea de Hacienda es dejar en suspenso el actual mecanismo de reparto debido al "efecto perverso" producido por la variable migratoria. Este factor, que en la actualidad determina el reparto del 20% del fondo, ha permitido a Cataluña y al País Vasco aumentar en más de 17.000 millones de pesetas sus ingresos por este concepto, en perjuicio de comunidades como Andalucía y Extremadura. Según los cálculos de Hacienda, la tasa migratoria ha proporcionado a Cataluña unos ingresos adicionales del 3,4% del FCI y al País Vasco del 3,7%. Andalucía habría perdido un 4% y Extremadura un 1,7%.La idea de Hacienda es que la población y la renta per cápita determinen fundamentalmente la distribución del FCI, dando una importancia muy secundaria a factores como la superficie, el paro, el saldo migratorio o la insularidad. De esta forma -según explicó ayer el secretario general de Planificación y Presupuestos, Antonio Zabalza, durante la clausura del congreso Política Regional en la Europa de los 90- el FCI se convertirá en 1992 en un instrumento de potenciación del equilibrio regional. El Fondo actuaría como un elemento adicional del Feder comunitario.

Esta política de equidad regional que está dispuesto a potenciar el Ministerio de Economía y Hacienda, se financiaría con el FCI, el Feder, y el Fondo de Incentivos Regionales. Este último instrumento, que en la actualidad dispone de unos 20.000 millones de pesetas al año, verá considerablemente aumentada su importancia en los próximos años.

Todo ello implica que el FCI -que se dota con el 30% de la inversión civil nueva del Estado y sus organismos autónomos- quedará reservado para las comunidades menos desarrolladas. De esta forma, Hacienda se acercaría a las posiciones defendidas por la Comisión Europea en lo que concierne a política regional. Entre las innovaciones fundamentales de la reforma de los fondos estructurales comunitarios figura precisamente la concentración de recursos en las regiones menos favorecidas. El 80% de los fondos del Feder para 1989-1993 se destinarán a las zonas atrasadas y el 20% a las zonas en declive industrial.

Según el director general de Planificación, José Alberto Zaragoza, las comunidades autónomas a priori perjudicadas por esta reforma se han mostrado inicialmente favorables al proyecto de Hacienda de anular la incidencia del factor migratorio en el FCI, porque sería políticamente perjudicial oponerse frontalmente a una modificación que viene a frenar la pérdida de ingresos sufrida por este factor por las comunidades más pobres. Las comunidades ricas, al mismo tiempo, tendrían un primer argumento de presión a la hora de conseguir un buen acuerdo de financiación autonómica en 1991.

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