Continúa la incertidumbre

Los mercados de valores continúan pendientes de los tipos de interés y, aunque en la mañana de ayer las operaciones del mercado interbancario a corto plazo bajaron ligeramente, el alza que registraron las letras del Tesoro a tres meses -hasta el 13,75%- confirmaron en buena parte los temores de los inversores. El resultado más visible es un descenso en el volumen negociado en renta variable, al que hay que añadir una mayor selección a la hora de intervenir en los corros. La actividad del mercado continuo, sin embargo, se mantiene para los valores que ofrecen expectativas propias a medio plazo,...

Los mercados de valores continúan pendientes de los tipos de interés y, aunque en la mañana de ayer las operaciones del mercado interbancario a corto plazo bajaron ligeramente, el alza que registraron las letras del Tesoro a tres meses -hasta el 13,75%- confirmaron en buena parte los temores de los inversores. El resultado más visible es un descenso en el volumen negociado en renta variable, al que hay que añadir una mayor selección a la hora de intervenir en los corros. La actividad del mercado continuo, sin embargo, se mantiene para los valores que ofrecen expectativas propias a medio plazo, ya que está siendo bien aceptada la posibilidad de operar varias veces con el mismo valor a lo largo de la jornada.Frente al goteo a la baja que están registrando la mayoría de los sectores, está la repercusión que tiene en las sociedades de cartera de Banesto la configuración de un holding industrial, publicando estos valores posiciones de dinero sin operaciones ante la fuerte demanda de títulos registrada.

El sector bancario, a pesar de que la caja mostraba unas posiciones bastante ajustadas, se dejó llevar por el exceso vendedor, al tiempo que seguía al resto del mercado en lo que se refiere al descenso en el volumen negociado.

Las posiciones al cierre empezaban a volcarse del lado vendedor, lo que afectó también a los valores del mercado continuo que, después de ir ganando altura casi toda la mañana, a partir de las tres de la tarde empezaron a perder valor.