La Semana Santa termina con una cifra provisional de 168 muertos en las carreteras
La operación Semana Santa terminó ayer, Lunes de Pascua, con una cita provisional de 168 muertos en accidentes de tráfico, según los últimos datos provisionales comunicados a las diez de la noche por la Dirección General de Tráfico (DGT). Desde las tres de la tarde del día 17 -cuando Tráfico inició la operación - hasta ese momento se registraron 148 accidentes en las carreteras españolas, que también han causado 119 heridos graves y 80 leves. En la Semana Santa de 1988 se produjeron 196 fallecidos, según los datos globales de Tráfico.
Las mayores retenciones de tráfico del regreso de la...
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La operación Semana Santa terminó ayer, Lunes de Pascua, con una cita provisional de 168 muertos en accidentes de tráfico, según los últimos datos provisionales comunicados a las diez de la noche por la Dirección General de Tráfico (DGT). Desde las tres de la tarde del día 17 -cuando Tráfico inició la operación - hasta ese momento se registraron 148 accidentes en las carreteras españolas, que también han causado 119 heridos graves y 80 leves. En la Semana Santa de 1988 se produjeron 196 fallecidos, según los datos globales de Tráfico.
Las mayores retenciones de tráfico del regreso de las vacaciones se produjeron ayer en las carreteras catalanas a 50 y 100 kilómetros de Barcelona en los accesos a las autopistas desde la costa. En Tordesillas (Valladolid) se produjeron colas de vehículos de más de 20 kilómetros.La operación retorno de Semana Santa finalizó oficialmente a medianoche de ayer, día festivo en el País Vasco, Cataluña y el País Valenciano. El regreso de Baleares a la Península por barco se realizó con normalidad el domingo y ayer, a pesar de la huelga de los trabajadores de la Compañía Trasmediterránea.
El tiempo veraniego que durante el fin de semana disfrutó la mayor parte del litoral mediterráneo hizo que el grueso de la operación retorno a Cataluña se concentrara especialmente en la tarde de ayer, con lo que, a pesar de las drásticas medidas adoptadas por Tráfico, se produjeron numerosas retenciones en los accesos a la autopistas desde las poblaciones de la costa y en el punto de confluencia de las autopistas de Tarragona y Lérida.
Superada esta primera línea de obstáculos, que en algunos casos provocaron colas de más de 10 kilómetros, la circulación hasta Barcelona se desarrolló con lentitud, pero con fluidez creciente, hasta el punto de que los accesos inmediatos a la ciudad no presentaban a media tarde colapsos de importancia.
Por el norte, se produjeron retenciones entre Calella y Arenys de Mar y en Mataró.
En Valencia, la operación retorno se desarrolló con normalidad y sin grandes retenciones en las carreteras de acceso a la ciudad. Unos 300.000 vehículos pasaron ayer por Valencia, según la Jefatura Provincial de Tráfico. De éstos, unos 150.000 eran de valencianos que regresaban a la ciudad después de las vacaciones de Semana Santa, puesto que el día de ayer también era festivo. El resto corresponde a automóviles procedentes fundamentalmente de las costas del sur del País Valenciano que atravesaron la ciudad en su ruta de regreso a sus lugares de origen, principalmente Barcelona y Madrid. El tráfico en sentido sur a norte fue muy intenso desde primeras horas de la mañana.
Choque frontal
Por otra parte, tres personas murieron en la mañana de ayer en las afueras de Orense, al chocar frontalmente el coche que: ocupaban contra un camión. En la colisión se vieron implicados otros cuatro turismos, cuyos ocupantes salieron ilesos.
En el País Vasco, el resultado de los accidentes de carretera a lo largo de las vacaciones de Semana Santa ha sido este año relativamente optimista, informa Tonia Etxarri. Tan sólo se registraron dos accidentes con víctimas mortales desde el mediodía del Jueves Santo hasta ayer por la mañana. La salida escalonada favoreció la normaridad.
El regreso por barco de Balea res se realizó con normalidad e domingo y ayer, a pesar de la huelga que han mantenido los trabajadores la última semana según un portavoz de la Compañía Trasmediterránea. Todas las personas que se presentaron para embarcar pudieron hacerlo y algunos barcos salieron con plazas vacías.