España suscribirá el Convenio de Nápoles, sobre vigilancia aérea y marítima de aduanas

Luis Herrera Castrillón, inspector general del Servicio de Vigilacia Aduanera español, aseguró ayer en Jerez, que "es intención del Gobierno español, adherirse en fecha inmediata al Convenio de Nápoles", adhesión que actualmente se encuentra en trámite y que próximamente será tratada en Consejo de Ministros.El Convenio de Nápoles, sobre vigilancia y control marítimo y aéreo desde el punto de vista aduanero, está suscrito por la mayoría de los países comunitarios, y al mismo también se suscribirá el Gobierno portugués. Según Herrera, la adhesión aportará para España "un mayor número de inst...

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Luis Herrera Castrillón, inspector general del Servicio de Vigilacia Aduanera español, aseguró ayer en Jerez, que "es intención del Gobierno español, adherirse en fecha inmediata al Convenio de Nápoles", adhesión que actualmente se encuentra en trámite y que próximamente será tratada en Consejo de Ministros.El Convenio de Nápoles, sobre vigilancia y control marítimo y aéreo desde el punto de vista aduanero, está suscrito por la mayoría de los países comunitarios, y al mismo también se suscribirá el Gobierno portugués. Según Herrera, la adhesión aportará para España "un mayor número de instrumentos especiales para el control del narcotráfico".

El representante aduanero español asistió ayer a la clausura en Jerez de unas jornadas donde se analizó el resultado de la Operación Iceberg 88, llevada a cabo conjuntamente por los servicios de vigilancia aduanera del Reino Unido, Portugal, Francia y España.

Los 40 representantes europeos presentes en las jornadas calificaron de "altamente positivo" el resultado de la operación Iceberg 88, contra el contrabando aduanero y el narcotráfico, en la que se han llevado a cabo un total de 370 operaciones de control y seguimiento de embarcaciones, 120 reconocimientos e intervenciones, y la aprehensión, entre otras sustancias, de más de 17 toneladas de hachís.

Otra de las conclusiones de las jornadas es la puesta en marcha de una nueva operación, bajo el nombre Jerez 89, prevista para el próximo año, y que será planificada desde el Reino Unido. Esta operación, destinada especialmente a la lucha contra el contrabando aduanero y el narcotráfico, ampliará su zona de actuación respecto a la Iceberg 88, incluyendo además del sur de la península ibérica y el Atlántico Norte, toda la zona marítima del Mediterráneo.

Según Herrera, esta ampliación al Mediterráneo es una consecuencia de los resultados positivos de la operación que ahora finaliza, "que hay que explotarlos extendiendo el radio de actuación". También se acordó en las jornadas, ampliar la colaboración de otros países para la próxima operación, invitando a los servicios aduaneros de Holanda e Italia, que en un primer momento actuarían en calidad de observadores, y que prestarían servicios de información.

El inspector general del servicio aduanero español calificó de "suficiente" el actual marco jurídico contra el narcotráfico, aunque aseguró que hacen falta "más medios para su control, por que los contrabandistas de altura disponen cada vez de más medios al ingresar ingentes cantidades de dinero procedentes de la venta de droga".

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Ampliación de personal

Herrera Castrillón, destacó el "gran esfuerzo" realizado por el Ministerio de Hacienda para dotar de los mejores medios al servicio de vigilancia aduanera, aunque matizó que "para tener todos esos medios en operativo, y durante las 24 horas, se necesita más personal". "Realmente sí sentimos esa necesidad de aumento de personal", afirmó Herrera "porque la plantilla está desproporcionada con respecto a los medios disponibles", añadió.Sobre la posible ampliación de la plantilla del servicio aduanero, Herrera dijo que "eso siempre es complicado, y excede de mis competencias", aunque señaló que ya existían, en los presupuestos generales del Estado de 1987 y 1988 partidas presupuestarias para el aumento de la plantilla.

La jornadas clausuradas ayer en Jerez finalizaron con una exhibición de las nuevas embarcaciones del Servicio de Vigilancia Aduanera, a la que asistieron los 40 representantes europeos de los servicios de aduanas.

La exhibición tuvo lugar en las instalaciones de Puerto Sherry, en El Puerto de Santa María (Cádiz), hasta donde se trasladaron un patrullero de altura tipo Alcaraban, y las dos embarcaciones Altar y HJ, de alta velocidad tipo turbo-jet. A bordo de ellas los representantes de los servicios aduaneros recorrieron la bahía de Cádiz, y les fueron explicadas las nuevas técnicas que ha desarrollado el servicio español, en el control aduanero de la zona marítima del Estrecho.

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