GENTE

Eduardo Martínez,

párroco de San Fulgencio (Alicante), ha decidido rifar un burro, con objeto de recaudar fondos para reconstruir la parroquia. La historia comenzó el mes pasado, cuando este cura asistió a una boda en Elche, en la que conoció a un joven que poseía caballerías y, tras un férreo regateo, Martínez se llevó el pollino a buen precio. La venta de papeletas para la rifa ha aportado por el momento 200.000 pesetas, aunque Martínez, que ha recaudado 14 millones en dos años y dice necesitar 35 millones para las reparaciones, está convencido de que son necesarias "muchas ideas originales para conseguir el ...

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párroco de San Fulgencio (Alicante), ha decidido rifar un burro, con objeto de recaudar fondos para reconstruir la parroquia. La historia comenzó el mes pasado, cuando este cura asistió a una boda en Elche, en la que conoció a un joven que poseía caballerías y, tras un férreo regateo, Martínez se llevó el pollino a buen precio. La venta de papeletas para la rifa ha aportado por el momento 200.000 pesetas, aunque Martínez, que ha recaudado 14 millones en dos años y dice necesitar 35 millones para las reparaciones, está convencido de que son necesarias "muchas ideas originales para conseguir el dinero".

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