Tribuna:

Las alternativas del Tesoro

El ajuste técnico que experimentaron ayer los tipos de interés tan sólo sirvió para que los mercados de valores insistieran en el goteo a la baja de los últimos días. La presión del papel se mantuvo a lo largo de toda la mañana, aunque en algunos momentos hubo algún despiste, sobre todo cuando se conoció A resultado de la subasta de préstamos, con un descenso en el precio del dinero de un octavo de punto. Los tanteos de los compradores duraron poco, ya que el incremento en el rendimiento de las letras del Tesoro anulaba cualquier posibilidad de un trasvase de fondos hacia las bolsas. Las cotiz...

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El ajuste técnico que experimentaron ayer los tipos de interés tan sólo sirvió para que los mercados de valores insistieran en el goteo a la baja de los últimos días. La presión del papel se mantuvo a lo largo de toda la mañana, aunque en algunos momentos hubo algún despiste, sobre todo cuando se conoció A resultado de la subasta de préstamos, con un descenso en el precio del dinero de un octavo de punto. Los tanteos de los compradores duraron poco, ya que el incremento en el rendimiento de las letras del Tesoro anulaba cualquier posibilidad de un trasvase de fondos hacia las bolsas. Las cotizaciones acusaron con más fuerza ese aumento de la rentabilidad de los activos públicos que el descenso -casi simbólico- del precio del dinero.La presión del papel fue ligeramente mayor que la del día anterior, aunque el factor dominante vuelve a ser la ausencia de compradores. El martes no se llegó a un nuevo mínimo anual de contratación porque el mercado ha comenzado a efectuar algunas aplicaciones importantes que han elevado ligeramente el nivel del negocio. Aun así, parece que en estos momentos va a ser difícil superar los 6.000 millones de pesetas efectivas en una sesión. En esta última se vio algún interés por unos cuantos valores que habían recortado su precio en estos días, pero todo siguió su curso al quedar claro el movimiento de ajuste monetario.

Junto a los recortes de los sectores industriales se dio una nueva baja en los valores bancarios, que empiezan a ser el barómetro del mercado. Las posiciones al cierre eran muy parecidas a las de las últimas sesiones, con el papel esperando compradores y el dinero encontrando otras alternativas.

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