Las empresas de fertilizantes prescinden de los creditos del BCI

Las distintas empresas de fertilizantes, Explosivos Río Tinto (ERT), Enfersa, Cros y Nicas, principalmente, han decidido prescindir de los créditos y avales aprobados por el Banco de Crédito Industrial (BCI) para ayudar al proceso de reconversión industrial. Las compañías estiman que el tipo de interés aplicado por la entidad de crédito oficial, que actualmente se sitúa en el 14,65%, ha dejado de tener carácter privilegiado y no tiene comparación posible con la oferta del mercado, donde dichas empresas obtienen ahora sus recursos a un coste medio de entre un 11% y un 11,5%.El BCI decidi...

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Las distintas empresas de fertilizantes, Explosivos Río Tinto (ERT), Enfersa, Cros y Nicas, principalmente, han decidido prescindir de los créditos y avales aprobados por el Banco de Crédito Industrial (BCI) para ayudar al proceso de reconversión industrial. Las compañías estiman que el tipo de interés aplicado por la entidad de crédito oficial, que actualmente se sitúa en el 14,65%, ha dejado de tener carácter privilegiado y no tiene comparación posible con la oferta del mercado, donde dichas empresas obtienen ahora sus recursos a un coste medio de entre un 11% y un 11,5%.El BCI decidió aumentar a primeros de este año el precio de los recursos destinados a la reconversión, desde el 12,50% que aplicaba anteriormente. En medios del sector se considera que esta política del BCI repercute considerablemente en los gastos financieros, lo que supone al mismo tiempo una contradicción con los objetivos del plan de reconversión de fertilizantes, entre los que figura la reducción de dichos costes financieros para las compañías afectadas.

Por esta razón, de los 10.500 millones de pesetas que habían sido presupuestados por el BCI para la reconversión de fertilizantes, el nivel de utilización tan sólo alcanza la cifra de 5.800, de acuerdo con los datos más actuales cuantificados a finales del primer semestre de este año.

La partida de créditos y avales procedentes del BCI figura como la más importante dentro de la cifra global de ayudas a la reconversíón, ya que las subvenciones para inversiones materiales y para investigación y desarrollo (I+D) se sitúan globalmente en torno a los 7.000 millones de pesetas.

Las empresas del sector han hecho ver a sus interlocutores del BCI la conveniencia de ajustar los tipos de interés con el fin de facilitar el proceso de las inversiones en curso que, por otra parte, están siendo aceleradas en los últimos meses, una vez que el nuevo mapa del sector se ha ido perfilando.

La protesta al BCI ha sido elevada al Ministerio de Industria por la Sociedad de Reconversión de Fertilizantes (Sorefersa), en la que participan las distintas compañías acogidas al plan. Por su parte, el gerente de Sorefersa, Jorge Nella, ha mostrado su preocupación ante el consejo de administración de esta sociedad por el bajo nivel de empleo de los créditos del BCI.

Según Neila, esta situación ha incidido también en algunas inversiones estratégicas, como la planta de Sagunto y las inversiones en amoniaco, que necesitan una capitalización muy fuerte y, sin embargo, han ido muy justas en su financiación. En estos momentos las inversiones materializadas ascienden a 24.000 millones de pesetas, casi un 50% en relación a los 49.000 millones previstos en el plan. De esta última cifra, 45.000 millones corresponden a inversiones en activos materiales y 4.000 millones a I+D. Las ayudas concedidas, al margen los créditos del BCI, se sitúan actualmente en torno a los 2.000 millones, de los que 130 son subvenciones a I+D, lo que supone un 30% del total presupuestado.

Existe, en consecuencia, un desfase en la habilitación de las ayudas oficiales conforme evoluciona el ritmo de las inversiones realizadas por las empresas.

A la vista de esta situación, y con el fin de asegurar el destino final de los recursos oficiales aprobados para la reordenación del sector, Sorefersa ha solicitado a las compañías que reactualicen sus programas para poder readaptar las resoluciones pertinentes que permiten la habilitación de ayudas antes de finales de año, cuando termina el plan de reconversión.

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