47 peregrinos perecen en el incendio de un monasterio egipcio

Cuarenta y siete peregrinos, entre ellos 27 niños, murieron ayer quemados y aplastados en un incendio que se produjo en los alrededores de la muralla del monasterio de Al Maharrak, situado en el Alto Egipto, a 320 kilómetros al sur de El Cairo, según fuentes oficiales. El incendio se originó al estallar una bombona de butano de las utilizadas para iluminar las tiendas de campaña que rodeaban el monasterio, donde se celebraba una fiesta religiosa, señaló el director de Seguridad de la provincia de Assiut, Mohamed Abdel Halim Moussa.Muchas de las víctimas estaban durmiendo a sus niños cuando fue...

Cuarenta y siete peregrinos, entre ellos 27 niños, murieron ayer quemados y aplastados en un incendio que se produjo en los alrededores de la muralla del monasterio de Al Maharrak, situado en el Alto Egipto, a 320 kilómetros al sur de El Cairo, según fuentes oficiales. El incendio se originó al estallar una bombona de butano de las utilizadas para iluminar las tiendas de campaña que rodeaban el monasterio, donde se celebraba una fiesta religiosa, señaló el director de Seguridad de la provincia de Assiut, Mohamed Abdel Halim Moussa.Muchas de las víctimas estaban durmiendo a sus niños cuando fueron aplastadas por los peregrinos que huían ante el incendio presas del pánico, declaró la misma fuente, que descartó que el siniestro hubiera sido provocado por un acto de sabotaje.

Sólo siete de las víctimas mortales halladas a un lado del monasterio fueron identificadas, mientras las 40 restantes estaban irreconocibles. Otras 15 personas resultaron heridas como consecuencia del incendio, dijeron fuentes oficiales.

Varios miles de personas, cristianos y musulmanes, se habían reunido para celebrar la fiesta ecuménica de la Virgen, según el rito copto-ortodoxo. La fiesta de la Virgen se celebra, de acuerdo a la tradición del monasterio, durante una semana. Cuando se produjo la tragedia de ayer hacía dos días que se había iniciado.

Las autoridades ordenaron el arresto del propietario de la tienda en la que se declaró el incendio, el cristiano Sabri Girges Chehata. "La negligencia y la ausencia de equipos para combatir el fuego fueron responsables de que las llamas se extendieran a 140 tiendas", coincidieron en señalar diversas fuentes.