Tribuna:

Compromiso cumplido

El nuevo máximo conseguido por los mercados de valores ha resultado insuficiente para tranquilizar a los inversores, puesto que se esperaba una respuesta más firme ante una noticia que debía conceder un buen margen de tranquilidad a las bolsas. El buen ambiente que podía generar un déficit comercial norteamericano inferior al previsto se ha visto contrarrestado por las realizaciones de beneficios con que los habituales han respondido a la esperada entrada de dinero. La única explicación parece estar en el nivel del índice, similar al que se disfrutaba a primeros de septiembre del año pasado.Un...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El nuevo máximo conseguido por los mercados de valores ha resultado insuficiente para tranquilizar a los inversores, puesto que se esperaba una respuesta más firme ante una noticia que debía conceder un buen margen de tranquilidad a las bolsas. El buen ambiente que podía generar un déficit comercial norteamericano inferior al previsto se ha visto contrarrestado por las realizaciones de beneficios con que los habituales han respondido a la esperada entrada de dinero. La única explicación parece estar en el nivel del índice, similar al que se disfrutaba a primeros de septiembre del año pasado.Una vez más se ha podido comprobar el escaso impacto de las buenas noticias en el mercado, hasta ahora sólo con capacidad para impedir salidas precipitadas. El constante goteo vendedor que han patrocinado las instituciones ha sido, sin embargo, bien absorbido por un dinero más libre de temores, aunque los inversores pudieron ver cómo ayer se retiraban algunas de las órdenes compradoras que habían apoyado la subida. Junto a las realizaciones y las retiradas se mantienen algunos tanteos compradores en torno a los valores que parecen capaces de resistir la presión de las indecisiones algunos días más.

A las subidas generalizadas que disfrutaron la mayoría de los sectores hay que oponerles la incapacidad del sector bancario para alejar el papel de su entorno. Aunque la repetición sigue siendo la respuesta a la presencia de ventas en este grupo, ya se han dado algunas bajas importantes en otras bolsas, como la sufrida por el Banesto en Barcelona y Valencia, y que le ha restado 70 enteros. Las posiciones al cierre insistían en mantener la selección.

Archivado En