La falta de dinero provoca malestar

Los mercados de valores han concluido la semana en medio de un ambiente negativo cuyo principal resultado ha sido la ausencia de dinero. Nadie dudaba de la presencia, en esta jornada de cierre, de un volumen realizador importante, pero también se esperaba que la baja de las cotizaciones llevase a una toma de posiciones casi generalizada. La baja sufrida por Wall Street y las noticias que iban llegando de otros mercados han puesto nerviosos a los inversores, hasta el punto de que en algunos casos han tenido que aguantarse los deseos de comprar algunos valores cuya cotización parecía atractiva.E...

Los mercados de valores han concluido la semana en medio de un ambiente negativo cuyo principal resultado ha sido la ausencia de dinero. Nadie dudaba de la presencia, en esta jornada de cierre, de un volumen realizador importante, pero también se esperaba que la baja de las cotizaciones llevase a una toma de posiciones casi generalizada. La baja sufrida por Wall Street y las noticias que iban llegando de otros mercados han puesto nerviosos a los inversores, hasta el punto de que en algunos casos han tenido que aguantarse los deseos de comprar algunos valores cuya cotización parecía atractiva.El sector bancario ha ofrecido una especie de resumen de lo que había sido la sesión hasta ese momento, con un volumen vendedor importante para la mayoría de sus componentes y un mercado que ha acudido a toda prisa a cubrir las escasas posiciones compradoras que registró la caja. La repetición ha sido el resultado que ha tenido más adeptos, con lo que se vuelve a poner de manifiesto la capacidad de resistencia a la baja de este sector.

En esta ocasión no se han dado excepciones a las bajas, con lo que todos los sectores -excepto el bancario- han contribuido a que el índice general redujese en un 50% la subida que había acumulado a lo largo de la semana. El sector químico se anotó la baja más acusada al retirarse los inversores de esos valores a toda prisa. Petróleos cedió 15 enteros, justo al finalizar la ampliación de capital, y sin que los derechos de suscripción cotizasen. Los valores eléctricos también cedieron posiciones, ya que ENDESA se unió a la ausencia de compradores.

Las posiciones al cierre eran vendedoras, pero con el papel esperando con tranquilidad la reanudación de la actividad a la semana próxima. Esta actitud de los vendedores, ya conocida, no impide que el ambiente fuese bastante negativo a última hora.