RELIGIÓN

Una hermana de Lefebvre abrirá un convento de monjas integristas

La madre Marie-Christiane, de 79 años, hermana del cardenal rebelde Marcel Lefebvre, ha anunciado que en marzo abrirá en Suiza el primer convento de monjas carmelitas integristas.La monja francesa ha sido entrevistada, por vez primera, por la periodista de Maten Magazine Francine Brunschwig, en su convento de carmelitas de Kuievrain, en Bélgica. Pero sin que pudiera ver más que una sombra detrás de una doble reja de madera y hierro y con el velo negro sobre la cara.

Fiel siempre a su hermano, le llama con respeto "monseñor" a secas. Hablando de él dice: "Monseñor me formó con sus...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La madre Marie-Christiane, de 79 años, hermana del cardenal rebelde Marcel Lefebvre, ha anunciado que en marzo abrirá en Suiza el primer convento de monjas carmelitas integristas.La monja francesa ha sido entrevistada, por vez primera, por la periodista de Maten Magazine Francine Brunschwig, en su convento de carmelitas de Kuievrain, en Bélgica. Pero sin que pudiera ver más que una sombra detrás de una doble reja de madera y hierro y con el velo negro sobre la cara.

Fiel siempre a su hermano, le llama con respeto "monseñor" a secas. Hablando de él dice: "Monseñor me formó con sus cartas. Él tiene toda la razón en actuar así. Posee una visión clarísima de todo".

En realidad fue siempre Lefebvre quien la sostuvo a ella y a sus hermanas carmelitas ultraconservadoras económicamente. Y también ahora ha sido él, con la ayuda de sus amigos de extrema derecha, quien le ha conseguido el nuevo carmelo que fundará en Suiza, formado por cuatro carmelitas de 24, 25, 27 y 34 años, de edad, todas fieles seguidoras del indómito Lefebvre y de su misticismo conservador.

Hablando del ultra francés Jean Marie Le Pen y del hecho de que en sus campañas use a los extranjeros como cabezas de turco, la monja Lefobvre afirma: "Lo cierto es que los extranjeros pululan en toda Francia. En París, por ejemplo, no se ven más que negros por las calles y eso da miedo".

También dice que está apenada por tener que fundar el nuevo carmelo "sin la autoridad de los obispos", pero explica que no tiene más remedio que hacerlo: "Así Dios me lo pide".

Archivado En