Los fiscales del 'caso Catalana' ultiman un recurso de 13 folios

Los fiscales del caso Banca Catalana, Carlos Jiménez Villarejo y José María Mena, presentarán hoy el recurso de reforma contra el auto dictado por el juez Luis Fernando Gómez Vizcarra, que denegó el procesamiento de los 16 directivos querellados. Los fiscales sostienen en el escrito, que consta de 13 folios, los fundamentos utilizados en la petición de procesamiento, realizada el 30 de junio de 1986. En el recurso se vuelve a solicitar el procesamiento de los directivos.Los argumentos que se mantienen en el escrito inciden, en gran parte, en refutar los razonamientos formulados por el j...

Los fiscales del caso Banca Catalana, Carlos Jiménez Villarejo y José María Mena, presentarán hoy el recurso de reforma contra el auto dictado por el juez Luis Fernando Gómez Vizcarra, que denegó el procesamiento de los 16 directivos querellados. Los fiscales sostienen en el escrito, que consta de 13 folios, los fundamentos utilizados en la petición de procesamiento, realizada el 30 de junio de 1986. En el recurso se vuelve a solicitar el procesamiento de los directivos.Los argumentos que se mantienen en el escrito inciden, en gran parte, en refutar los razonamientos formulados por el juez Vizcarra sobre la inexistencia de delitos de apropiación indebida y falsedad en documento mercantil, algunos de los cuales son novedosos respecto a los expuestos en el auto del Pleno de la Audiencia que exculpó a Jordi Pujol.

El recurso de reforma deberá ser resuelto por el juez en breve plazo y, dado que previsiblemente la respuesta será confirmar el auto dictado, los fiscales podrían presentar un segundo recurso, éste de apelación. En esta segunda instancia, el recurso se presentaría ante la Sección Segunda de lo Penal de la Audiencia de Barcelona, cuyos magistrados votaron a favor de la exculpación de Jordi Pujol en el pleno de la Audiencia.

Fuentes judiciales señalaron que a la hora de resolver el recurso de apelación se puede plantear un problema de abstención, ya que los magistrados que deberán pronunciarse también fueron instructores del sumario, aunque la labor se delegó en un juez único que después informaba al pleno. Las mismas fuentes precisaron que ante esta situación se podía plantear la necesidad de formar una sala compuesta por magistrados que no entendieron del caso en la instrucción inicial.