Tribuna:

La precaución logra imponer su criterio

La capacidad de respuesta del mercado ha quedado en entredicho debido al pequeño número de compradores de esta última sesión. Una coyuntura económica bastante aceptable no parece ser lo suficientemente atractiva como para decidir a los inversores a volver a la renta variable, y ello a pesar de que la liquidez se encuentra en unos niveles; muy altos. Esta limitación del dinero que está dispuesto a asumir los riesgos de un mercado caprichoso ha sorprendido a los habituales y les ha llevado a cancelar algunas de las posiciones que habían tomado en estos últimos días. El papel ha ido haciendo acto...

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La capacidad de respuesta del mercado ha quedado en entredicho debido al pequeño número de compradores de esta última sesión. Una coyuntura económica bastante aceptable no parece ser lo suficientemente atractiva como para decidir a los inversores a volver a la renta variable, y ello a pesar de que la liquidez se encuentra en unos niveles; muy altos. Esta limitación del dinero que está dispuesto a asumir los riesgos de un mercado caprichoso ha sorprendido a los habituales y les ha llevado a cancelar algunas de las posiciones que habían tomado en estos últimos días. El papel ha ido haciendo acto de presencia en una jornada en la que ni siquiera la banca dio muestras de poder mantener la orientación alcista.La falta de confianza continúa siendo el factor de más peso en la actual orientación de las bolsas, hasta el punto de que nadie se plantea una operación con un plazo superior a los tres días. Los pequeños avances de estas semanas han sumado plusvalías hasta acumular un 10%, cifra muy atractiva para un mercado que no sabe muy bien hacia dónde se dirige. El papel que no había aparecido hasta ahora ha encontrado estos precios lo suficientemente atractivos como para lanzar una primera andanada que, de momento, ha frenado la trayectoria alcista.

El sector bancario ha mostrado el primer saldo negativo desde que se anunciara la fusión de los dos bancos vascos, al parecer debido a la aportación de papel que uno de los grandes bancos, viene haciendo cada día después de publicados los saldos. Aun así, los avances consiguen imponerse, y el índice general ha podido beneficiarse del empuje de este sector, lo que le permite marcar un nuevo máximo del año. Las posiciones al cierre indicaban cierto desconcierto y un pequeño predominio vendedor debido más al exceso de precauciones que a la presencia de un peligro concreto, algo que se repite desde octubre.

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