Proceso de concentración bancaria

En busca de las reservas tácitas

"A nosotros, del Banesto nos interesa el grupo industrial que, sin duda, es el más potente de España. Nuestra aportación sería la gestión, que es en lo que somos más fuertes". Estas palabras de Eduardo Aguirre, vicepresidente del Banco de Bilbao pronunciadas en Barcelona, el mismo día en que el banco vizcaíno descubrió sus cartas, pueden ser un indicio del objetivo de la operación. Otros directivos del Bilbao fueron más explícitos "creernos que el valor real de muchas participadas y las reservas no afloradas de Banesto son enormes".Las reservas de Banesto a finales del pasado mes de septiembre...

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"A nosotros, del Banesto nos interesa el grupo industrial que, sin duda, es el más potente de España. Nuestra aportación sería la gestión, que es en lo que somos más fuertes". Estas palabras de Eduardo Aguirre, vicepresidente del Banco de Bilbao pronunciadas en Barcelona, el mismo día en que el banco vizcaíno descubrió sus cartas, pueden ser un indicio del objetivo de la operación. Otros directivos del Bilbao fueron más explícitos "creernos que el valor real de muchas participadas y las reservas no afloradas de Banesto son enormes".Las reservas de Banesto a finales del pasado mes de septiembre ascendían a 100.677 millones de pesetas. El valor de las acciones en cartera se elevaba a 104.690 millones de pesetas. En 1986, Banesto no declaró resultados positivos, pero los beneficios atípicos (venta de participaciones, paquetes de acciones en bolsa e inmuebles) alcanzaron los 36.091 millones de pesetas. El capital social de Banesto es de 36.091 millones de pesetas, los depósitos alcanzan los 1.900.696 millones de pesetas, cuenta con 16.900 empleados y una red de 2.236 oficinas.

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La mejor gestión

Por su parte, el Banco de Bilbao se ha caracterizado en los últimos años por una incesante mejora de la gestión. En 1986, los ingresos por servicios alcanzaron los 26.692 millones de pesetas, con lo que consolidaba su posición de líder en el sector en este aspecto. El beneficio de gestión del grupo financiero (integrado por 55 sociedades) ascendió, en términos consolidados, a 39.212 millones de pesetas, con un incremento del del 36% en relación al ejercicio anterior. El Bilbao, con un capital social de 23.740 millones de pesetas y unas reservas de 94.905 millones de pesetas, declaró el pasado ejercicio unos beneficios de 24.972 millones de pesetas, lo que significó un incremento del 40,6% en relación a 1985.El Banco de Bilbao emplea a 16.114 personas, tiene un capital muy repartido entre 322.802 accionistas (el doble que Banesto), 1.418 oficinas y generó un cash flow (beneficios mas amortizaciones) de 73.848 millones de pesetas. El cash flow de Banesto fue de 84.868 millones.

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