Cartas al director

Vivir en Colón

Llámenme conservador, llámenme reaccionario, llámenme lo que quieran, pero, por favor, déjenme en paz. Vivir o trabajar -como es mi caso- en el área de la plaza de Colón de Madrid es una pesadumbre y un albur insoportables. Uno jamás sabe si va a poder salir o entrar en la zona normalmente, ya sea en automóvil o transportes públicos de superficie. Lo que sí sabe es que en cualquier momento un instante de tranquilidad puede verse turbado por los alaridos, cuando no los proyectiles -piedras, latas, botellas, etcétera- de unos manifestantes que hacen de estas zonas de Madrid una suerte de campo d...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Llámenme conservador, llámenme reaccionario, llámenme lo que quieran, pero, por favor, déjenme en paz. Vivir o trabajar -como es mi caso- en el área de la plaza de Colón de Madrid es una pesadumbre y un albur insoportables. Uno jamás sabe si va a poder salir o entrar en la zona normalmente, ya sea en automóvil o transportes públicos de superficie. Lo que sí sabe es que en cualquier momento un instante de tranquilidad puede verse turbado por los alaridos, cuando no los proyectiles -piedras, latas, botellas, etcétera- de unos manifestantes que hacen de estas zonas de Madrid una suerte de campo de Agramante. Lo que sí sabe es que junto a un grupo pacífico que reivindica civilizadamente sus derechos hay una muchedumbre que, aprovechando el revuelto, río que le brinda la pasividad de los verdaderos responsables del orden público -y no me refiero a la policía-, se dedican a orinar donde les peta, a insultar, provocar y agredir a quien les place y, en el menos malo de los casos, a pretender insolentemente que el atribulado transeúnte beba vino de una bota rebosante de babas.Si, haciendo caso de las recomendaciones municipales, utilizo los transportes públicos, ¿cómo se me compensa cuando, a causa de tan heterogéneos actos de protesta, me veo obligado a abandonarlos a mitad del trayecto? ¿Qué garantía se ofrece al viajero de que se respetará el itinerario de cada línea en su integridad y duración del trayecto teóricamente habituales?

Señores sindicalistas y manifestantes, el mismo derecho que ustedes reclaman para manifestarse donde quieran tengo yo para

Pasa a la página siguiente

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En