Aparcar por la cara

El descenso en el número de boletos de la ORA vendidos indica que se está adoptando en una progresión cada vez mayor la política de aparcar por la cara. Los conductores que acuden diariamente a la zona afectada por la ORA encuentran muchas dificultades para encontrar libre una de las 50.000 plazas controladas. Eso no significa que los ocupantes de esas plazas paguen por dejar en ellas su vehículo, pues, según datos municipales, en el primer semestre de este año se vendieron 917.506 boletos frente a los 1.130.217 del mismo período de 1986, lo que supone un descenso del 19%.Las cifras, correspon...

El descenso en el número de boletos de la ORA vendidos indica que se está adoptando en una progresión cada vez mayor la política de aparcar por la cara. Los conductores que acuden diariamente a la zona afectada por la ORA encuentran muchas dificultades para encontrar libre una de las 50.000 plazas controladas. Eso no significa que los ocupantes de esas plazas paguen por dejar en ellas su vehículo, pues, según datos municipales, en el primer semestre de este año se vendieron 917.506 boletos frente a los 1.130.217 del mismo período de 1986, lo que supone un descenso del 19%.Las cifras, correspondientes a seis meses de 1987 contrastan con las obtenidas cuando se comenzó a aplicar la ORA. El 25 de diciembre de 1980, y tras 52 días de aplicación de la medida, el Ayuntamiento informó que se habían vendido 1.388.700 boletos para un área que entonces sólo abarcaba 18.000 plazas.

Por otra parte, la menor utilización de boletos no ha ido unida a un incremento de las sanciones que se logran cobrar. Francisco Herrera, concejal de Izquierda Unida y presidente de la Comisión de Circulación, afirma que sólo se pagan el 10% de las 7.000 infracciones diarias que se ponen por incumplimiento de la ORA. El equipo de gobierno facilita pocos datos. Los últimos, referidos a 1985, cifraban el porcentaje de sanciones pagadas en el 36% de las impuestas.