Derechos y soportes

La importancia del acuerdo firmado entre autores, editores y difusores de la música grabada tiene especial trascendencia de cara al futuro. El creciente peso de la revolución tecnológica va a afectar de forma decisiva la estructura de la industria fonográfica. Durante décadas, los medios audiovisuales habían servido a las compañías discográficas como un eficaz elemento de promoción. A partir de ahora, la venta de soportes, sea en disco, casete, compact-disc, casete digital, vídeo-disco o cualquier otro que pueda surgir no supondrá más que una mínima parte del negocio total. La industria...

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La importancia del acuerdo firmado entre autores, editores y difusores de la música grabada tiene especial trascendencia de cara al futuro. El creciente peso de la revolución tecnológica va a afectar de forma decisiva la estructura de la industria fonográfica. Durante décadas, los medios audiovisuales habían servido a las compañías discográficas como un eficaz elemento de promoción. A partir de ahora, la venta de soportes, sea en disco, casete, compact-disc, casete digital, vídeo-disco o cualquier otro que pueda surgir no supondrá más que una mínima parte del negocio total. La industria sobrevivirá gracias a los ingresos obtenidos por los derechos de difusión a través de los diferentes medios que van a surgir. Según Eduardo Bautista, vicepresidente de la SGAE, "la cadena creador-editor-difusor se va a mantener, pero el marco tecnológico va a modificar su sentido por completo". Ramón Segura, presidente de AFYVE, afirma que "las ventas de soportes ya se han estabilizado y su sector no considera previsión alguna de mejora". Su objetivo es ahora otro. Los medios electrónicos están dejando de ser un medio, van a ser su sentido de existencia.

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