El edificio ruinoso de la calle de Don Quijote será demolido con piqueta

La empresa propietaria del edificio ubicado en el número 39 de la calle de Don Quijote, en peligro de. hundimiento desde hace 10 días, se encargará. de su demolición por el método de la piqueta. El sábado fue instalada una grúa junto al edificio para facilitar los trabajos, que empezaron a lo largo del fin de semana.Un tramo de la calle de cerca de 100 metros permanecerá cortada al tráfico mientras dure la demolición. Los trabajos pueden prolongarse durante una semana. Los estudios técnicos de la estructura del edificio, realizados por un equipo de arquitectos y aparejadores, han aconsejado qu...

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La empresa propietaria del edificio ubicado en el número 39 de la calle de Don Quijote, en peligro de. hundimiento desde hace 10 días, se encargará. de su demolición por el método de la piqueta. El sábado fue instalada una grúa junto al edificio para facilitar los trabajos, que empezaron a lo largo del fin de semana.Un tramo de la calle de cerca de 100 metros permanecerá cortada al tráfico mientras dure la demolición. Los trabajos pueden prolongarse durante una semana. Los estudios técnicos de la estructura del edificio, realizados por un equipo de arquitectos y aparejadores, han aconsejado que se apuntale la fachada, para evitar un derrumbe súbito, y posteriormente se proceda a su demolición. Los técnicos piensan que la situación del edificio hace inviable la voladura controlada.

Fuentes municipales precisaron que se espera que en el plazo de ocho días todos los vecinos que fueron desalojados de los edificios colindantes puedan volver a sus casas.

Los propietarios del edificio, que residen en Valencia, han decidido llevar a cabo la demolición después de que el Ayuntamiento les requiriera para que escogieran entre realizar ellos el trabajo o dejarlo en manos del Ayuntamiento.

El edificio estaba arrendado a la filial de IBM Logic 2000 Control. En su interior había almacenada gran cantidad de material informático, utilizado fundamentalmente para actividades propias de un centro de cálculo.

Fuentes de esta empresa han señalado que, aparte de los ordenadores instalados en el local, el material más valioso son las cintas con información de todo tipo de sus clientes.

Los propietarios han contratado para la demolición a la empresa Astumar.

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