M'Bow mantiene su posibilidad de reelección tras la primera votación en la Unesco

El actual director general de la Unesco, Amadou Mahtar M'Bow, obtuvo 18 de los 50 votos del Consejo Ejecutivo, en la primera vuelta en las elecciones para reemplazarle celebradas ayer por la noche, después de dos días de interminable debate sobre cuestiones de procedimiento. El paquistaní Yaqub Jan, apoyado por los principales países occidentales, obtuvo 16 votos; el candidato del bloque socialista, Todorov, obtuvo seis, y el español Federico Mayor, otros seis. Las primeras impresiones recogidas entre los consejeros permiten aventurar que la perfecta disciplina de los votantes de Jan desplazar...

El actual director general de la Unesco, Amadou Mahtar M'Bow, obtuvo 18 de los 50 votos del Consejo Ejecutivo, en la primera vuelta en las elecciones para reemplazarle celebradas ayer por la noche, después de dos días de interminable debate sobre cuestiones de procedimiento. El paquistaní Yaqub Jan, apoyado por los principales países occidentales, obtuvo 16 votos; el candidato del bloque socialista, Todorov, obtuvo seis, y el español Federico Mayor, otros seis. Las primeras impresiones recogidas entre los consejeros permiten aventurar que la perfecta disciplina de los votantes de Jan desplazará todavía con mayor fuerza un cierto número de votos residuales hacia M'Bow, como los dos del indonesio Soyamuko, o los votos de la candidata antillana Salomon y del yugoslavo Ivo Margan.

M'Bow podría obtener, en el caso más extremo, la mayoría absoluta en la segunda votación que puede celebrarse hoy, a menos que se produzca algún tipo de negociación previa. Los seis votos del búlgaro Todorov pueden pasar directamente a M'Bow si en el interín no surge de candidato de consenso. Tres votos de Yaqub Jan pueden también cambiar en la próxima votación. Los seis votos de Mayor siguen colocándole, a pesar del escaso margen que le ha proporcionado la polarización de la votación, en una situación favorable para su mantenimiento como tercero en disputa y por tanto como candidato de consenso.La Unesco, tan criticada principalmente por los países occidentales por su burocratización, está proporcionando un ejemplo extremo de la pasión por los debates estériles y por las reuniones, a través de uno de sus máximos órganos decisorios, el Consejo Ejecutivo, que se ha reunido durante dos días para decidir sobre cuestiones de procedimiento, previas a la elección del nuevo director general. Ayer, al final de los debates, los consejeros decidieron que todas las cuestiones de procedimiento quedaran aplazadas, de forma que pueden reaparecer en cualquier momento entre votación y votación.

Después de estos primeros capotazos, la candidatura del paquistaní Yaqub Jan es la que aparece como más desgastada, mientras que la del español Federico Mayor Zaragoza sigue suscitando tantas simpatías como escepticismos. Amadou Mahtar M'Bow, en cambio, sigue aguantando y afianzando cada vez más su imagen de gran elector con quien habrá que negociar si no se desea su reelección después de casi 14 años de mandato.

Cuestiones de procedimiento

Las cuestiones de procedimiento no son evidentemente neutrales. Se ha discutido sobre la eventualidad de dejar intervalos entre las cinco votaciones de que dispone el consejo, sobre la necesidad de contar con los historiales de los candidatos y sobre la posibilidad de introducir nuevos candidatos entre votación y votación.Todas estas cuestiones interesan a los países que no desean la continuidad de Amadou M'Bow, que esperan contar, después de la primera votación y de un primer mapa de las fuerzas en presencia, con la salida de un nuevo candidato sorpresa, que hasta ayer se dibujaba en la persona del ministro de Asuntos Exteriores de Uruguay, Enrique Iglesias, y ahora se centra de nuevo en el ex comisario de las Naciones Unidas para los refugiados, el iraní Sadrudin Jan.

La propia misión de Estados Unidos, que participa como observadora, ha empezado a tantear las posibilidades de este nuevo no-candidato, ante las dificultades que está encontrando Yaqub Jan. Pero, sin pausas de negociación y sin autorización para irrumpir con nuevos nombres, M'Bow es ya virtualmente el candidato electo. De ahí la oposición del grupo árabe-africano a discutir sobre asuntos de procedimiento.

El candidato español tiene las cosas más complicadas. No le interesa la posibilidad de nuevos candidatos, como Enrique Iglesias, que arrumbarían sus bazas como nombre de consenso. Pero tampoco le interesa una votación lineal, que, en el mejor de los casos, terminaría con Yaqub Jan y le enfrentaría mano a mano con M'Bow.

Mayor frente a M'Bow, aseguran fuentes de la Unesco, significa el fin de: Mayor, primero porque vence M'Bow y más tarde porque el actual director general, en caso de una retirada posterior, no negociaría como nombre de consenso el de quien se le ha enfrentado en la última votación.