Irak intensifica la guerra contra Irán tras el fracaso de la ONU

Irak intensificó este fin de semana sus ataques contra Irán, al fracasar el viernes una iniciativa de Estados Unidos y el Reino Unido, en el seno de la ONU, para imponer un embargo mundial de armas a Teherán. La aviación iraquí lanzó ayer una serie de ataques contra objetivos enemigos y bombardeó dos barcos iraníes, uno de ellos un petrolero que cargaba crudo, un pozo petrolífero y una estación de radio, según un comunicado militar de Bagdad. Irán reconoció que los ataques habían causado al menos 10 muertos civiles.

La situación en el golfo Pérsico, en el que navegan más de 70 buques de...

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Irak intensificó este fin de semana sus ataques contra Irán, al fracasar el viernes una iniciativa de Estados Unidos y el Reino Unido, en el seno de la ONU, para imponer un embargo mundial de armas a Teherán. La aviación iraquí lanzó ayer una serie de ataques contra objetivos enemigos y bombardeó dos barcos iraníes, uno de ellos un petrolero que cargaba crudo, un pozo petrolífero y una estación de radio, según un comunicado militar de Bagdad. Irán reconoció que los ataques habían causado al menos 10 muertos civiles.

La situación en el golfo Pérsico, en el que navegan más de 70 buques de guerra, volvió a complicarse ayer al anunciar el Pentágono que había hundido el viernes el barco iraní Iran Arj, capturado el lunes por la Marina estadounidense, que acusó a la tripulación de estar colocando minas en aguas internacionales.Teherán reaccionó de inmediato ante el hundimiento del Iran Arj y pidió a Estados Unidos que aclarara si este acto constituía "una declaración de guerra formal" contra Irán.

Al mismo tiempo, llegaron ayer a Teherán los cuerpos de tres de los tripulantes muertos en el ataque efectuado el lunes por Estados Unidos contra el Iran Arj y los 26 supervivientes, devueltos por Washington a través de Omán y por intermedio de la Media Luna Roja (denominación en el mundo islámico de la Cruz Roja).

El intento de embargo propuesto por Estados Unidos, con el apoyo británico, en el seno del Consejo de Seguridad de la ONU no prosperó, debido fundamentalmente a la reticencia de la Unión Soviética y China, según dijeron medios diplomáticos.

En cambio, los miembros permanentes del Consejo de Seguridad (EE UU, URSS, el Reino Unido, Francia y China) renovaron el mandato del secretario general de la ONU, Javier Pérez de Cuéllar, para negociar un alto al fuego sobre la base de la resolución 598.

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