Intoxicación psiquiátrica

En este país, al parecer, se persigue y penaliza a los traficantes de drogas y a los drogadictos. Desconozco empíricamente el tema, pero es indudable que existen otros tipos de drogas y otras maneras de drogar, y me refiero a la mala o deficiente utilización de los psicofármacos en los hospitales psiquiátricos. Un mal tratamiento psicopatológico, psíquicamente, y en algunos casos fisicamente, puede producir en el paciente una intoxicación psiquiátrica -lo que se llaman "efectos medicamentosos"- de espeluznante gravedad, en contra de su voluntad.Mi experiencia como sufriente de los nervios -cas...

En este país, al parecer, se persigue y penaliza a los traficantes de drogas y a los drogadictos. Desconozco empíricamente el tema, pero es indudable que existen otros tipos de drogas y otras maneras de drogar, y me refiero a la mala o deficiente utilización de los psicofármacos en los hospitales psiquiátricos. Un mal tratamiento psicopatológico, psíquicamente, y en algunos casos fisicamente, puede producir en el paciente una intoxicación psiquiátrica -lo que se llaman "efectos medicamentosos"- de espeluznante gravedad, en contra de su voluntad.Mi experiencia como sufriente de los nervios -casi toda ella perteneciente a la época del anterior régimen- es desastrosa. Desde el psiquiatra que te encierra e incomunica durante meses, atiborrándote arbitraria y aberrantemente de pastillas e inyecciones, produciendo un efecto de psicosis absolutamente nociva, pasando por el alienista joven que quiere inveáigar impune e irresponsablemente, hasta una equivocación por ambas partes, error lamentable, pero ulteriormente perdonado, también por ambas partes.

Escribo esto porque tengo miedo. Miedo a los malos psiquiatras. Miedo a que me droguen de nuevo. No es que esté al borde de una crisis, pero pienso en otras víctimas, compañeros y amigos, de la opresión y de la represión. Si un psiquiatra dice que esto son tonterías, más le vale, al menos, permanecer callado, porque hablo con la voz del sufrimiento, y la voz del sufrimiento no puede ser falsa.- Juan Manuel Pendas.