Una lengua de tierra movediza amenaza de nuevo a la ciudad granadina de Olivares

Una porción de la lengua de tierra que desde una ladera vecina amenazó en abril de 1986 con sepultar la localidad granadina de Olivares ha entrado de nuevo en movimiento a consecuencia de las últimas lluvias. El desprendimiento remitió en mayo pasado y desde entonces un equipo de científicos, junto con miembros de Protección Civil, han seguido el desarrollo del fenómeno. El miércoles los vecinos descubrieron una nueva grieta en la parte más alta del monte de la que se desprendía lentamente la tierra....

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Una porción de la lengua de tierra que desde una ladera vecina amenazó en abril de 1986 con sepultar la localidad granadina de Olivares ha entrado de nuevo en movimiento a consecuencia de las últimas lluvias. El desprendimiento remitió en mayo pasado y desde entonces un equipo de científicos, junto con miembros de Protección Civil, han seguido el desarrollo del fenómeno. El miércoles los vecinos descubrieron una nueva grieta en la parte más alta del monte de la que se desprendía lentamente la tierra.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En