Aumenta la tensión en Melilla al impedir la policía que un cuñado de Dudú entre en la ciudad

La tensión ha vuelto a incrementarse en Melilla a raíz de un incidente que se produjo en la frontera con Marruecos. La policía española de servicio en el paso de Beni-Enzar prohibió ayer tarde la entrada en territorio nacional de Abdelaziz Ouriachi, cuñado del dirigente musulmán Aomar Mohamedi Dudú, que protagonizó hace un par de semanas un grave incidente en la misma frontera, al desoír los requerimientos policiales y adentrarse en Melilla. Los agentes españoles comunicaron a Ouriachi que actuaban en cumplimiento de una orden que le prohíbe la entrada en España durante cinco años.

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La tensión ha vuelto a incrementarse en Melilla a raíz de un incidente que se produjo en la frontera con Marruecos. La policía española de servicio en el paso de Beni-Enzar prohibió ayer tarde la entrada en territorio nacional de Abdelaziz Ouriachi, cuñado del dirigente musulmán Aomar Mohamedi Dudú, que protagonizó hace un par de semanas un grave incidente en la misma frontera, al desoír los requerimientos policiales y adentrarse en Melilla. Los agentes españoles comunicaron a Ouriachi que actuaban en cumplimiento de una orden que le prohíbe la entrada en España durante cinco años.

La notificación de la prohibición que fue firmada por el secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, y fue remitida a todos los puestos fronterizos con Marruecos, motivó el inicio de una serie de incidentes, con protestas de Ouariachi, funcionario de aduanas marroquí, y la llegada a la frontera de Dudú, acompañado del secretario general de Terra Omnium y del presidente de la comunidad musulmana, Sid Driss Abdelkader.A ambos lados de la frontera se congregaron varios cientos de musulmanes en actitud belicosa y llegaron, desde la parte marroquí, a arrojar piedras contra las fuerzas de orden público españolas, en tanto que los miembros de una compañía de reserva de la Policía Nacional, desplazados días pasados desde Córdoba, tomaban posiciones en los accesos a la frontera con el fin de impedir la concentración de más musulmanes.

La tensión creció por momentos, lo que obligó a que la gendarmería marroquí disolviera los grupos concentrados en zona neutral. La policía española se mantuvo a la expectativa, mientras vehículos policiales iniciaban recorridos por distintas zonas de la ciudad, especialmente los barrios de población musulmana.

Poco después de las cuatro de la tarde llegó a la frontera el delegado del Gobierno, Manuel Céspedes, quien mantuvo una reunión en el edificio de aduanas, al tiempo que policías marroquíes accedían al mismo edificio para entrevistarse con policías españoles. A las cinco de la tarde, y cuando se disponía a entrar en Melilla, fue detenido el dirigente musulmán radical Abderramán Mohamed.

Abderramán fue trasladado a comisaría en un furgón celular. Poco después se personaron en la zona neutral Dudú, Halifa Mohamed y Sid Driss Abdelkader, quienes mantuvieron un tenso diálogo tanto con policías españoles como marroquíes, en tanto los miembros de la reserva especial de la Policía Nacional seguían atentamente el desarrollo de los hechos.

Posteriormente, en una conferencia de prensa, Manuel Céspedes informó que se había instruido expediente para la expulsión de España de Abderramán Mohamed, al tiempo que aseguró que Ouriachi no había recibido malos tratos.

La situación se mantuvo igual hasta poco antes de las siete de la tarde, cuando unos mil musulmanes se trasladaron a la mezquita central, donde se celebró una asamblea presidida por Halifa Mohamed y Sid Driss Abdelkader. Halifa pidió a los presentes que volviesen a sus domicilios "y esperaran allí las órdenes que traería Dudú desde Marruecos".

Ouriachi ha sido internado en un hospital de Nador, donde será sometido a reconocimiento, en tanto que Dudú ha manifestado, en tierra marroquí, que se trasladará definitivamente a vivir a Nador si la situación no se normaliza.