Un miembro de la infraestructura del comando ETAm logró escapar de la acción policial.

Un miembro de la infraestructura de información y apoyo del comando de ETA Militar detenido el viernes pasado en Madrid logró escapar de la operación policial que culminó con la detención en Madrid de seis integrantes de la organización terrorista, según han confirmado a este periódico fuentes del Ministerio del Interior. El denominado en euskera lagunzaile (colaborador) debió conocer con prontitud la detención de sus compañeros de comando y huyó inmediatamente de su domicilio habitual, adonde fueron a detenerle sin éxito miembros de la policía.

La identidad del miembro de la infraestru...

Un miembro de la infraestructura de información y apoyo del comando de ETA Militar detenido el viernes pasado en Madrid logró escapar de la operación policial que culminó con la detención en Madrid de seis integrantes de la organización terrorista, según han confirmado a este periódico fuentes del Ministerio del Interior. El denominado en euskera lagunzaile (colaborador) debió conocer con prontitud la detención de sus compañeros de comando y huyó inmediatamente de su domicilio habitual, adonde fueron a detenerle sin éxito miembros de la policía.

La identidad del miembro de la infraestructura de ETAm en Madrid no ha trascendido has ta el, momento, pero, según las fuentes citadas, uno de los miembros del comando etarra detenido en Madrid facilitó la identidad del séptimo componente del comando y su dirección, pero cuando la policía acudió a su domicilio para detenerle, éste había huido ya.Al parecer, la rápida filtración de la noticia dio lugar a que el lagunzaile -miembro legal de la infraestructura que facilita información y apoyo al comando operativo- enterado de que sus compañeros habían sido detenidos, pudiera escapar a la acción policial.

Según las fuentes consultadas, este miembro del comando, estudiante, compartía las labores de apoyo al comando operativo con las dos legales -no fichadas por la policía Cristina Arrizabalaga Vázquez y María Teresa Rojo Paniego.

Su trabajo, al igual que el de estas dos mujeres, consistía en recabar información para llevar a cabo futuros atentados.

Fuentes del País Vasco han manifestado a este periódico que Cristina Arrizabalaga y María Teresa Rojo Paniego, ambas naturales de San Sebastián, visitaban frecuentemente esta. ciudad.

Según fuentes policiales, estas los miembros legales del comando detenido en Madrid viajaban frecuentemente al País Vasco para facilitar a la dirección de ¡a organización terrorista información sobre futuros objetivos, y recibían las órdenes para realizar las acciones.

Contacto con Francia

Las citadas fuentes están con vencidas de que ellas y seguramente el huido, al ser miembros legales, servían de correo entre el comando operativo y la dirección de ETAm. Se desconoce hasta el momento si las cita das llegaban al sur de Francia o disponían de un contacto en el País Vasco.

Los seis detenidos han declarado a la policía durante su interrogatorios que algunos de los históricos del denominado comando España o Madrid como María del Rosario Delgado Iriondo y Juan Manuel Soares Gamboa participaron con el comando operativo detenido el pasado viernes en Madrid en algunos atentados de la campaña terrorista desplegada por ETAm en Madrid en 1984. Sin embargo, la frecuente publicación en los medios de información de sus nombres y otros que ya habían salido de Madrid les obligó a dejar la capital de España y volver al sur de Francia.

La policía también ha conocido por los citados interrogatorios que la dirección de ETA Militar decidió cambiar su estructura en Madrid al iniciarse en Francia la campaña de extradiciones y deportaciones de activistas de la organización temiendo que pudiera caer algunos de los, históricos miembrosdel comando Madrid y pudiera revelar información sobre la infraestura que mantenía desde hacía años ETAm en la capital de España.

De hecho, los pisos y el chalé que ha localizado la policía en Madrid y sus alrededores estaban alquilados o comprados, en el caso del chalé, en 1986.

Fuentes del Ministerio del Interior han confirmado que alguno de los integrantes del comando operativo como el ex miembro de la policía autónoma vasca Juan Ignacio de Juan Chaos estuvieron en septiembre en el sur de Francia, donde, al parecer, recibieron indicaciones para iniciar la campaña terrorista de invierno.

Por otra parte, el vicealmirante Julio Albert Ferrero, ex director de la Escuela de Guerra Naval, declaró a este periódico que su nombre figuraba en una lista intervenida por la policía francesa en la fábrica de muebles Sokoa, en Hendaya, y desde esa época llevaba escolta.

Su nombre no figura en la información encontrada al comando etarra detenido en Madrid.

Fuentes del Ministerio del Interior han asegurado que -tal información se encontraba en la documentación intervenida en la fábrica de Sokoa, así como la de un futuro atentado contra un almirante que también fue avisado en su día. y mantiene su escolta como medida de precaución.

Las citadas fuentes han afirmado que el comando detenido el viernes en Madrid iba a cometer un inminente atentado contra un alto jefe militar, cuyo nombre no quisieron revelar.