44 trabajadores despedidos cumplen un mes de encierro

Los trabajadores despedidos por una supuesta huelga ilegal en Robles Bouso Atracciones, empresa ubicada desde hace más de 15 años en el polígono industrial de Leganés, cumplen hoy un mes de encierro.El 16 de septiembre, la dirección de la empresa, dedicada a la fabricación y exportación de aparatos para parques de atracciones, despidió a 44 de los 62 trabajadores porque, según Antonio Robles Bouso, uno de los propietarios, iniciaron un paro ilegal al regreso de vacaciones, cuando se les notificó que iban a sufrir un retraso en el pago de la nómina de septiembre. Según los despedidos, esta huel...

Los trabajadores despedidos por una supuesta huelga ilegal en Robles Bouso Atracciones, empresa ubicada desde hace más de 15 años en el polígono industrial de Leganés, cumplen hoy un mes de encierro.El 16 de septiembre, la dirección de la empresa, dedicada a la fabricación y exportación de aparatos para parques de atracciones, despidió a 44 de los 62 trabajadores porque, según Antonio Robles Bouso, uno de los propietarios, iniciaron un paro ilegal al regreso de vacaciones, cuando se les notificó que iban a sufrir un retraso en el pago de la nómina de septiembre. Según los despedidos, esta huelga no existió, ya que ellos se reincorporaron, pero se encontraron con que no había trabajo en la cadena de producción.

Desde el inicio de este conflicto laboral la empresa ha quedado paralizada, en tanto que la dirección y los sindicatos CC OO y UGT negocian una solución. Los responsables sindicales piden la readmisión de los despedidos.

Los trabajadores consideran inadmisible la primera de las ofertas de la dirección de Robles Bouso: readmitir a todos los despedidos, siempre que los trabajadores renuncien a la antigüedad, acepten contratos de un año, renuncia del convenio colectivo de la empresa y aceptación del provincial -lo que supondría una pérdida salarial-, y, por último, que la Administración, central o autonómica, les conceda una subvención de un millón por trabajador readmitido.

Para Antonio Robles Bouso, la situación en la empresa había llegado a tal punto de deterioro en la disciplina, en el trabajo y en las relaciones laborales que la única solución era la readmisión de los 44 trabajadores sólo con carácter temporal.

La otra propuesta, aportada en la reunión de ayer por el representante de los hermanos Robles Bouso, fue declararse incapaces y ceder las naves de la empresa, por arrendamiento, a los trabajadores para que formasen una cooperativa laboral.

Para los representantes de los trabajadores, la creación de esta sociedad anónima laboral no es un proyecto viable, dada la peculiaridad de la empresa Robles Bouso Atracciones, en la que la mayoría de los contratos son para la exportación.