El gran error

La noticia de más impacto de las últimas semanas ha sido la del asesinato de Yoyes. Seguramente, las cosas van a cambiar mucho en el seno de ETA. Yoyes era un ejemplo para todos aquellos militantes de la conocida organización terrorista vasca que pensaban acogerse al plan de "reinserción social". Según se ha dicho en los medios informativos, la ex etarra ternía que los dirigentes de ETA atentasen contra su vida para disuadir a todos aquellos que pensaran en abandonar la organización de que era mejor no hacerlo. Pero se equivocaron. Porque no sólo han demostrado a lo largo ...

La noticia de más impacto de las últimas semanas ha sido la del asesinato de Yoyes. Seguramente, las cosas van a cambiar mucho en el seno de ETA. Yoyes era un ejemplo para todos aquellos militantes de la conocida organización terrorista vasca que pensaban acogerse al plan de "reinserción social". Según se ha dicho en los medios informativos, la ex etarra ternía que los dirigentes de ETA atentasen contra su vida para disuadir a todos aquellos que pensaran en abandonar la organización de que era mejor no hacerlo. Pero se equivocaron. Porque no sólo han demostrado a lo largo de sus años de existencia que son unos asesinos y que han hecho del terror su religión, sino que han puesto de manifiesto que no existe una verdadera cohesión entre los militantes de ETA. Esto es algo muy significativo, pues lo más seguro es que los etarras de base que estén pensando en desertar del frente del terror llevarán a término su deseo). A Partir de ahora se producirá en el seno de ETA un debate interno, una especie de examen de inconsciencia para juzgar los últimos acontecimientos. También se ha dicho que el asesinato de Yoyes iría seguido de una serie de atentados de gran alcance en Madrid. La organización está intentando superar una grave crisis ideológica que en nada ha beneficiado las últimas decisiones alocadas de su alto mando. Además, ETA intentará convencer a sus chicos de que siguen siendo tan fuertes como antes y defender su prestigio (bastante negro, por cierto) ante la opinión pública. Por otro lado, se halla la polémica de la legalización de Herri Batasuna, que, aunque es agua pasada (el proceso judicial), sigue sembrando comentarios en toda la nación. Todo el mundo se pregunta si los militantes de HB son los mismos que los de ETA. Lo que sí es seguro es que, si no lo son, lo disimulan bastante bien. ETA necesita participar activamente en la política vasca, porque está claro que con los atentados no va a conseguir nada. Ahora sólo nos queda esperar que los militantes de ETA se decidan a abandonar la lucha armada- Murcia.