Malestar entre los obispos de EE UU por la sanción del Vaticano a un arzobispo

La sanción decidida hace dos semanas por el Vaticano contra el arzobispo progresista de Seattle, Raymond Hunthausen, de 65 años, por no estar de acuerdo con su política sobre las anulaciones matrimoniales y otros temas, ha producido una profunda preocupación y malestar entre los obispos miembros de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos. Un obispo ha calificado de "cruel" esta decisión vaticana.Raymond Hunthausen fue obligado por el Vaticano a ceder la mayoría de sus poderes pastorales a su obispo auxiliar Raymond Wuerl. Es decir, tuvo que renunciar a ejercer autoridad sobre temas mora...

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La sanción decidida hace dos semanas por el Vaticano contra el arzobispo progresista de Seattle, Raymond Hunthausen, de 65 años, por no estar de acuerdo con su política sobre las anulaciones matrimoniales y otros temas, ha producido una profunda preocupación y malestar entre los obispos miembros de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos. Un obispo ha calificado de "cruel" esta decisión vaticana.Raymond Hunthausen fue obligado por el Vaticano a ceder la mayoría de sus poderes pastorales a su obispo auxiliar Raymond Wuerl. Es decir, tuvo que renunciar a ejercer autoridad sobre temas morales, de liturgia, sobre la formación de los clérigos, las relaciones con los clérigos que han abandonado el sacerdocio y las anulaciones matrimoniales.

Los obispos de la Iglesia católica de Estados Unidos han guardado silencio durante los últimos 15 días sobre la considerada por muchos "dramática", decisión del Vaticano de imponer medidas disciplinares a uno de sus mas destacados colegas. Pero, a pesar del clima de miedo, algunos prelados han hecho públicas sus opiniones, en las que se trasluce una gran preocupación. Estiman los obispos que esta sanción afecta a su propia autoridad.

Hasta ahora los organismos oficiales no han cambiado esta decisión, que, según algunos historiadores de la Iglesia, solamente se ha tomado cuando un obispo se han mostrado incapaz, desde el punto de vista médico, de llevar los asuntos diocesanos. Por otra parte, sólo unos pocos obispos han accedido a ser entrevistados, sobre este tema.

Los obispos que han hablado sobre este hecho han sido muy moderados en sus respuestas. El cardenal Joseph Bernardin, de Chicago, dijo que Hunthausen y Wuerl "trabajarán en estrecha, colaboración para el bien de la Iglesia en SeattIe".

Pero algunos han expresado miedo, como el obispo auxiliar de Detroit, Thomas G. Gumbleton, quien ha usado términos como "cruel" e "injustificable" para describir la decisión vaticana tomiada sobre el arzobispo norteamericano de Seattle, Raymond Hunthausen.

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