Una fuerte tormenta inundó la noche madrileña

Una espectacular tormenta, con abundante descarga de aparato eléctrica y una intensa lluvia, inundó ayer por la noche las calles de Madrid. Todo empezó, hacia las 22.40, con un vendaval que pronto se convirtió en un concierto de truenos y una tromba incesante de agua. Inundaciones, apagones, atascos de tráfico y accidentes se sucedieron a lo largo de la noche. Una persona falleció durante la tormenta en un accidente en el kilómetro 39 de la carretera de la Coruña.

Al filo de las once de la noche, las centralitas de los bomberos y la Policía Municipal quedaron bloIqueadas. Inundaciones, ...

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Una espectacular tormenta, con abundante descarga de aparato eléctrica y una intensa lluvia, inundó ayer por la noche las calles de Madrid. Todo empezó, hacia las 22.40, con un vendaval que pronto se convirtió en un concierto de truenos y una tromba incesante de agua. Inundaciones, apagones, atascos de tráfico y accidentes se sucedieron a lo largo de la noche. Una persona falleció durante la tormenta en un accidente en el kilómetro 39 de la carretera de la Coruña.

Al filo de las once de la noche, las centralitas de los bomberos y la Policía Municipal quedaron bloIqueadas. Inundaciones, tejados hundidos, cornisas caídas o socavones eran el motivo más frecuente de las llamadas.En la calle de O'Donnell la policía tuvo que sacar de un automóvil a una familia que había quedado atrapada en su interior con el agua al nivel de las ventanillas. Varias familias que habitan en la calle de Villaamil, en el distrito de Tetuán, tuvieron que abandonar temporalmente sus casas, totalmente mundadas. Escenas como éstas se repitieron a lo largo de la noche en toda la ciudad.

Las estaciones de metro, los aparcamientos subterráneos y multitud de locales instalados en sótanos llevaron la peor parte. El puente de Segovia, la plaza de Colón, la calle de Menéndez Alvaro y el distrito de Vallecas fueron algunas de las zonas más afectadas. En el aeropuerto de Barajas las salidas sufrieron un retraso de dos horas, tiempo en el que no se permitió el despegue de ningún avión, aunque sí el aterrizaje.

La tromba motivó también la suspensión de varios espectáculos de Los Veranos de la Villa. En el templo de Debod la tormenta arreció con los últimos y estruendosos acordes de la Sinfonía del Nuevo Mundo. En el cuartel de Conde Duque, donde se representaba el ballet Carmen, los primeros en huir del temporal encontraron refugio en el soportal de la salida y taponaron durante unos minutos la de los más de 1.000 asitentes.

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