Tribuna:

El dinero permanece en casa por el calor

La escasa capacidad de reacción de que están haciendo gala los mercados de valores ha producido un nuevo descenso de los índices generales, con lo que se rompe la resistencia a la baja que se dio en las últimas sesiones de la semana anterior. El nivel de la contratación se encuentra en sus cotas más bajas y parece que esta débil presencia de dinero vuelve a dejar las decisiones en manos de los vendedores. El mercado a crédito, sin embargo, se mostró más activo, alcanzando las compras un 11,30% del total negociado. Aun así, esos poco más de 400 millones de pesetas no han conseguido estimular a ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La escasa capacidad de reacción de que están haciendo gala los mercados de valores ha producido un nuevo descenso de los índices generales, con lo que se rompe la resistencia a la baja que se dio en las últimas sesiones de la semana anterior. El nivel de la contratación se encuentra en sus cotas más bajas y parece que esta débil presencia de dinero vuelve a dejar las decisiones en manos de los vendedores. El mercado a crédito, sin embargo, se mostró más activo, alcanzando las compras un 11,30% del total negociado. Aun así, esos poco más de 400 millones de pesetas no han conseguido estimular a los compradores, y los mercados entran de lleno en una situación típica de la temporada veraniega, en la que se mantiene la actividad al nivel mínimo para poder abrir las puertas cada mañana. Si otros años estas cifras eran menores es porque guardan una estrecha relación con las cantidades negociadas en cada ejercicio, que en éste han superado todos los records.El goteo a la baja se convierte en un mal menor, pues en cuanto los precios hayan cedido lo suficiente se cambiará la orientación de las partidas y se recuperarán sin grandes esfuerzos, tal y como ha venido sucediendo en estas últimas semanas. Las eléctricas han mantenido la tendencia a la baja sin que en ningún caso se hayan perdido más de tres enteros, al tiempo que en algunos casos se recuperaba parte del terreno perdido en las sesiones precedentes. En este grupo, Gas y Electricidad abonó un dividendo único para el pasado ejercicio de 40 pesetas netas, de las que las acciones recuperaron 31,50 pesetas, esto es, 3,70 enteros.

La tendencia negativa se impuso asimismo en la mayor parte de los sectores industriales, con algo más de fuerza en construcción y química. En este último llegó a su término la ampliación de capital de Sarrió, recuperando las acciones viejas dos enteros en la operación. En el sector de alimentación, Tabacalera recuperó íntegro el dividendo complementario que pagaba a sus accionistas, mejorando además la cotización de sus títulos en tres enteros, con lo que este grupo es el único que conseguía ayer un avance.

Los valores bancarios sufrieron también la ausencia de unas expectativas claras en el mercado, y fueron los casos concretos los que, al final, consiguieron dar la sensación de equilibrio que mostraba el índice del grupo. Los siete grandes, los valores que más incidencia tienen en la elaboración del índice sectorial, registraron dos avances de 2 y 12 enteros, dos retrocesos de 5 y 16, y tres repeticiones, al tiempo que papel y dinero llegaban también a una posición de equilibrio, pues el saldo total de este grupo fue de 3.544 títulos a la venta. Los títulos negociados han descendido hasta 267.000, con lo que el volumen de contratación de esta sesión volverá a registrar, probablemente, un nuevo retroceso.

Para esta mañana no se esperan grandes cambios en la situación de los mercados, ya que todas las posibles causas que se barajan para explicar la apatía inversora, como puede ser la formación de un nuevo Gobierno o la importante demanda de dinero que las sociedades están haciendo actualmente al mercado empezarán a solucionarse dentro de una semana. Lo del verano tiene una solución bastante más complicada.

Archivado En