Arden más de 1.000 hectáreas en un incendio en la sierra cordobesa
Unas 1.200 hectáreas de monte bajo, encinar y pinar se han quemado en la sierra de Córdoba, en las cercanías de la capital, como consecuencia del incendio que se inició el miércoles hacia las 14.30 y que a primera hora de ayer tarde aún no había sido extinguido. Técnicos del Instituto Andaluz de Reforma Agraria (IARA) han calificado este incendio de verdadero desastre ecológico y el que hasta ahora supone mayores pérdidas económicas de todos cuantos se han originado en este verano.
El incendio, del que ayer aún se desconocía si fue o no intencionado, se inició en la carretera Córdob...
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Unas 1.200 hectáreas de monte bajo, encinar y pinar se han quemado en la sierra de Córdoba, en las cercanías de la capital, como consecuencia del incendio que se inició el miércoles hacia las 14.30 y que a primera hora de ayer tarde aún no había sido extinguido. Técnicos del Instituto Andaluz de Reforma Agraria (IARA) han calificado este incendio de verdadero desastre ecológico y el que hasta ahora supone mayores pérdidas económicas de todos cuantos se han originado en este verano.
El incendio, del que ayer aún se desconocía si fue o no intencionado, se inició en la carretera Córdoba-Badajoz, en el paraje denominado Carrera del Caballo, próximo a la capital. El fuerte viento reinante y las altas temperaturas propiciaron que se extendiera hacia el santuario de Santo Domingo, la barriada de Cerro Muriano -donde están ubicadas varias guarniciones militares- y el parque forestal de Los Villares.
Aunque en principio se temió por la integridad del santuario de Santo Domingo -donde los cordobeses acuden en romería una vez al año-, el fuego fue sofocado en dicho frente la noche del miércoles. Ayer al amanecer se continuaron las tareas de extinción y se logró sofocar otros de los focos, el que se extendía hacia Cerro Muriano, a unos 20 kilómetros de la capital. Las tareas centrales de la extinción de dirigieron entonces hacia el parque forestal, en cuyas inmediaciones está ubicado un club de golf y otro de tiro, ambos privados. De no sofocarse a tiempo esta ramificación del fuego, correría serio peligro el Centro de Instrucción de Reclutas número 5.