LA CAMPAÑA ELECTORAL

Suárez, dispuesto a hablar del 23-F si se sigue utilizando en la campaña

Adolfo Suárez, presidente del Centro Democrático y Social (CDS), reaccionó ayer ante las preguntas de los informadores que cubren su campaña sobre la posible introducción como tema de confrontación política de los comportamientos personales durante el 23 de febrero de 1981. Suárez repitió que no desea insistir en ese tema, pero acusó a Txiki Benegas de haberlo suscitado y repitió que no está dispuesto a callarse si se sigue utilizando en la campaña.

Suárez saludó efusivamente durante el almuerzo en Bilbao al ex concejal socialista Rogelio Bueno, suspendido de militancia por el PSOE, qui...

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Adolfo Suárez, presidente del Centro Democrático y Social (CDS), reaccionó ayer ante las preguntas de los informadores que cubren su campaña sobre la posible introducción como tema de confrontación política de los comportamientos personales durante el 23 de febrero de 1981. Suárez repitió que no desea insistir en ese tema, pero acusó a Txiki Benegas de haberlo suscitado y repitió que no está dispuesto a callarse si se sigue utilizando en la campaña.

Suárez saludó efusivamente durante el almuerzo en Bilbao al ex concejal socialista Rogelio Bueno, suspendido de militancia por el PSOE, quien ha decidido incoporarse al CDS.El ex presidente reaccionó con viveza a las sugerencias de varios informadores que valoraban como especialmente grave el hecho de que el fallido golpe de Estado de 1981 pudiera convertirse en arma arrojadiza durante la campaña. Por ello, dedicó buena parte del recorrido entre Zaragoza y Bilbao a cambiar impresiones con ellos y a insistir sobre su falta dé responsabilidad en ello, trasladándola al secretario de organización socialista, Txiki Benegas.

La jornada del sábado fue especialmente intensa para el líder del CDS, ya que, tras detenerse en Logroño y almorzar en Bilbao, prosiguió hacia Santander y Gijón, para terminar de madrugada en Oviedo.

En Logroño, Suárez defendió alguna de las medidas de su programa que más han llamado la atención, por ejemplo, la reducción del servicio militar a tres meses, y dijo que eso era posible porque, en definitiva, se trata de dedicar a la cuestión una parte del presupuesto.

HB y negociación con ETA

Discrepó de quienes se han mostrado contrarios a la legalización de Herri Batasuna (HB) como partido político: "El Tribunal Supremo ha dicho que es legal", afirmó, "y si hubiera actuaciones ilegales, que sean los jueces quienes lo digan".

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Las conversaciones entre HB y el PNV le parecen un buen método, "cualquiera que sea el resultado, aunque", prosiguió, "cualquier negociación exige un clima de paz, sin metralletas, contando siempre con el Gobierno vasco y con un profundo acuerdo entre los Gobiernos de Euskadi y Madrid".

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