La desconfianza es el único factor destacado

El carácter engañoso de las apariencias se ha puesto dem.anifesto en las bolsas, ya que el equilibrio de que venían haciendo ostentación los índices generales ha dejado al descubierto una serie de tensiones que, por fuerza, tenían que salir a la superficie. Unas declaraciones bien aprovechadas pueden salvar los resultados de una sesión, pero es evidente que a la siguiente ell mercado actuará de fuerza correctora.y pondrá las cosas en su sitio, provocando algunos nervios entre los que todavía no han aprendido a medir adecuadamente las reacciones de los valores.Las próximas ampliaciones de capit...

El carácter engañoso de las apariencias se ha puesto dem.anifesto en las bolsas, ya que el equilibrio de que venían haciendo ostentación los índices generales ha dejado al descubierto una serie de tensiones que, por fuerza, tenían que salir a la superficie. Unas declaraciones bien aprovechadas pueden salvar los resultados de una sesión, pero es evidente que a la siguiente ell mercado actuará de fuerza correctora.y pondrá las cosas en su sitio, provocando algunos nervios entre los que todavía no han aprendido a medir adecuadamente las reacciones de los valores.Las próximas ampliaciones de capital que se han de registrar en el sector eléctrico, y las que están en marcha, necesitan de un ambiente más favorable que el que ofrece el mercado actualmente; por esto, cualquier noticia que pueda tener una lectura positiva encontrará necesariamente un amplio eco entre los incondicionales del sector. Otra cosa es que los precios puedan soportar tranquilamente la indecisión que pesa sobre el mercado en estos momentos.

La corrección que sufrieron ayer las cotizaciones de los valores eléctricos responde perfectamente a este esquema, por lo que no hay que concederle más importancia que ésta. El problema estriba en que el ambiente que se crea en el sector eléctrico tiene bastante repercusion en el desarrollo posterior de la jornada, Es evidente que el grupo de valores eléctricos no puede resumir por si mismo toda una sesión, pero últimamente se acerca bastante a lo que se podría considerar como un sondeo de inténciones.

El papel volvió a ser el claro dominador del sector bancanio, y esta vez con más fuerza que en sesiones anteriores. Bien es verdad que los saldos que registraron estas instituciones no han sido abultados, pero demuestran la desconfianza con que se observa la situación actual. El saldo global de los siete grandes apenas sobrepasó los 100.000 títulos a la venta y las repeticiones se dieron en igual número que los retrocesos, al tiempo que los títulos negociados se vuelven a acercar a los 500.000. Dentro de este grupo, Banesto descontó un dividendo complementario de 11,48 pesetas netas, cediendo, además, casi medio entero.

Los sectores industriales se dejaron llevar por la corriente, ya sea por comodidad, bien por la propia incapacidad que tienen para definir su situación. Los valores punteros de cada grupo acusaron con más fuerza el ambiente negativo, arrastrando al resto, aunque se dieron algunas excepciones.

A pesar del claro ambiente negativo, fueron 28 los valores que publicaron posición de dinero sin operaciones, al tiempo que eran tan sólo seis los que se encontraban en la situación contraria. Asland inició su ampliación de capital en la proporción de una acción nueVa por cada 15 antigúas, totalmente liberada, cotizándose los derechos a 105,50 pesetas, con lo que las acciones viejas recuperaron algo más de tres enteros. Telefónica aportó su grano de arena, y su peso específico, a las bajas, redondeando así una sesión que no consigue justificar las expectativas positivas que se notan en elparqué. Pero esto tal vez sea hablar de la segunda quincena de este mes, al menos así lo apuntan los más optimistas.