Socialistas y 'populares' rechazan la creación de la policía autonómica valenciana

El voto conjunto de socialistas y populares frustró ayer la posibilidad de que la Generalitat valenciana cuente con una policía autonómica a plazo medio. Ambas formaciones, que ocupan más del 85% de los escaños de las Cortes valencianas, desestimaron una propuesta del Grupo Comunista que pedía la creación de una comisión que redactara una proposición de ley. Determinados cargos de la Generalitat valenciana expresaron ayer, privadamente, su desencanto por "el escaso interés que parece tener el Gobierno autonómico por contar con fuerzas de seguridad propias".Las razones oficiales esgrimida desde...

El voto conjunto de socialistas y populares frustró ayer la posibilidad de que la Generalitat valenciana cuente con una policía autonómica a plazo medio. Ambas formaciones, que ocupan más del 85% de los escaños de las Cortes valencianas, desestimaron una propuesta del Grupo Comunista que pedía la creación de una comisión que redactara una proposición de ley. Determinados cargos de la Generalitat valenciana expresaron ayer, privadamente, su desencanto por "el escaso interés que parece tener el Gobierno autonómico por contar con fuerzas de seguridad propias".Las razones oficiales esgrimida desde hace años para explicar esta negativa se refieren a que éste no es un asunto prioritario, máxime en épocas de restricciones presupuestarias. De hecho, en los últimos años, la creación de una policía autonómica apenas ha ocupado espacio en los medios informativos valencianos y es más bien un tema olvidado por la opinión pública.

Contar con un cuerpo de policía propio es una posibilidad reconocida en el Estatuto de Autonomía que hasta la fecha no ha sido objeto de debate parlamentario, ni siquiera ayer en la sesión que celebró la comisión institucional del Parlamento valenciano. Ésta se limitó a debatir cuestiones meramente formales de la propuesta comunista, finalmente rechazada.

Los comunistas, a través de su portavoz, Antonio Palomares, justificaron la conveniencia de crear este cuerpo en la necesidad de superar una estructura policial no ajustada a las especificidades valencianas.

Palomares citó, a título de ejemplo, que la Brigada de Estupefacientes cuenta en Valencia con apenas siete u ocho inspectores, insuficientes, a su juicio, para el control de los importantes traficantes de droga que se suponen asentados en tierras valencianas.