Los ministros europeos no lograron un acuerdo sobre el franco francés
Los ministros de Finanzas de los 12 países miembros de la Comunidad Europea (CE) no lograron llegar, durante la reunión mantenida ayer en un hotel de la localidad holandesa de Ootmarsum, a un acuerdo para la modificación de las paridades de las monedas que forman parte del Sistema Monetario Europeo (SME), convocando una nueva reunión para hoy, domingo. El ministro de Finanzas holandés, Onno Ruding, comunicó la falta de acuerdo ante la petición unilateral francesa de proceder a devaluar su divisa.
El comité monetario de la CE llegó, en la noche del viernes, a un acuerdo de principio sobr...
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Los ministros de Finanzas de los 12 países miembros de la Comunidad Europea (CE) no lograron llegar, durante la reunión mantenida ayer en un hotel de la localidad holandesa de Ootmarsum, a un acuerdo para la modificación de las paridades de las monedas que forman parte del Sistema Monetario Europeo (SME), convocando una nueva reunión para hoy, domingo. El ministro de Finanzas holandés, Onno Ruding, comunicó la falta de acuerdo ante la petición unilateral francesa de proceder a devaluar su divisa.
El comité monetario de la CE llegó, en la noche del viernes, a un acuerdo de principio sobre el alcance de los reajustes internos que modificaba el tipo de cambio del franco y el marco en un 5%, repartiéndose al 50% entre ambas monedas. Este acuerdo no fue aceptado posteriormente por los ministros de Finanzas en su reunión del sábado por la mañana, que remitieron de nuevo al comité de expertos -subgobernadores de bancos centrales y directores del Tesoro- para que elaboraran una nueva proposición que pudiera ser aprobada.Los ministros de Finanzas de la CE, convocados a la reunión con anterioridad para tratar de encontrar una posición común sobre los problemas económicos internacionales, se han encontrado con la necesidad de proceder a un reajuste de las paridades internas de las ocho divisas que forman parte del SME como consecuencia de la decisión del Gobierno francés de no seguir defendiendo el tipo de cambio del franco y dejar que se devaluara en un 5% en relación al marco alemán, según informa Andrés Ortega desde Bruselas.
Edouard Balladur, ministro francés de Finanzas, afirmó que su objetivo es una devaluación del franco del 8%. Los ministros de Finanzas de la CE deben llegar a un acuerdo hoy sobre las nuevas paridades de las monedas para que el lunes los merca.dos de cambios puedan volver a abrirse con normalidad.
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Fuertes resistencias en los países miembros de la CE
Viene de la primera páginaLa decisión del recién nombrado Gobierno francés ha provocado fuertes resistencias entre el resto de los países miembros porque la mayor parte de ellos consideran que no hay "en estos momentos" razones técnicas suficientes que justifiquen la caída del franco. La tasa de inflación francesa es más elevada que la del resto de países de la CE, pero el diferencial no es suficientemente importante como para justificar la medida.
Los ministros de finanzas que se oponen a la modificación de la paridad de las divisas, señalan que la decisión francesa es mucho más política que otra cosa, y que tiene que ver más con el cambio de Gobierno ocurrido en ese país que con los hipotéticos problemas económicos. La modificación de las paridades de las divisas integradas en el SME -con la consiguiente devaluación del franco y de otras como la lira italiana o la moneda belga y la revaluación del marco alemán y el florín holandés- supondría, según estas fuentes, hacer recaer todas las culpas de los problemas anteriores sobre el anterior Gobierno francés.
La devaluación del franco permitirá incrementar las exportaciones de productos de ese país,
abaratará el coste para los extranjeros que visiten Francia y encarecerá los precios de los productos importados. La balanza de pagos, debería mostrar un superávit mayor del actual. Al tiempo, provocará tensiones alcistas cm los precios interiores, empezando por los tipos de interés.
Para la República Federal de Alemania, la econonitía más sana de toda la CE, los efectos son los contrarios. Por ello, se opone a una revaluación elevada de su moneda en relación al conjunto de las que forman el SME, aunque acepte que tiene que prestar su colaboración para solucionar los problemas franceses.
Silencio español
Mientras que la mayor parte de los responsables de los países miembros de la CE han hecho llegar su posición inicial a la intención francesa de realineamiento de las divisas y su opinión sobre la oportunidad de la medida, los representantes españoles en Ootrnarsum mantienen un mutismo absoluto sin que haya trascendido donde se alinea España.
La posición española sería, según algunas fuentes, tratar de mantener el actual tipo de cambio efectivo de la peseta -combinación del tipo de cambio nominal y de la tasa de inflación- respecto a las monedas europeas para lo que procederá a devaluarse frente al marco alemán y elevar su tipo de cambio frente al franco francés y el resto de monedas que le acompañen en su caída.