Los minusválidos quieren su cupón.

Varias decenas de minusválidos interrumpieron al mediodía de ayer el tráfico en la Gran Vía -a la altura de la plaza de Callao- en protesta por la actuación de la Administración, que ordenó el mes pasado requisar el material de la sociedad Promoción y Difusión de Actividades Culturales, SA (Prodiecu), dedicada a la venta de unos boletos que se jugaban en combinación con los de la ONCE. Hace dos semanas, unos 400 minusválidos mantuvieron un encierro en la iglesia madrileña de los Jerónimos, pocos días después de un encierro similar en la catedral de Barcelona. Los boletos eran vendidos por 5.20...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Varias decenas de minusválidos interrumpieron al mediodía de ayer el tráfico en la Gran Vía -a la altura de la plaza de Callao- en protesta por la actuación de la Administración, que ordenó el mes pasado requisar el material de la sociedad Promoción y Difusión de Actividades Culturales, SA (Prodiecu), dedicada a la venta de unos boletos que se jugaban en combinación con los de la ONCE. Hace dos semanas, unos 400 minusválidos mantuvieron un encierro en la iglesia madrileña de los Jerónimos, pocos días después de un encierro similar en la catedral de Barcelona. Los boletos eran vendidos por 5.200 minusválidos, que ahora se manifiestan en todo el territorio español y reinvindican una solución por parte de la Administración.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En